Capítulo VI: Del francotirador al alfil, y otras sustancias.
Por Gwynt.
Si, usualmente soy un tipo tediosamente seguro. Pero todas las situaciones desencadenadas hoy me producen incomodidad. Sobre todo esa forma de reaccionar que surge cuando me encuentro fuera de escenario, cuando estoy arrinconado... La terrible cita la he consagrado solo gracias a Isabel. Y no puedo respirar sin que me duela.
Llegamos por separado a Galpón Z, I.K y Francesca se han ido de prisa, yo prefiero saborear el camino, recordar aquel extraño láser rojo, amenazando con destriparme en plena acera, y cuan tentadora me parecía la idea.
Al entrar, veo a Lynn sentada junto a una Daire totalmente extraviada, usando un vestido color malva, asi de inofensiva, mirada perdida. Lynn me saluda con señas, y hago un elegante gesto con la cabeza. Daire súbitamente se pone en pie y va hacia la habitación de Sid. Se asoma por la puerta, y me ordena mentalmente que le siga.
<<- ¿Estamos comunicándonos telepáticamente?
-Pues así parece, niñato ridículo. Te advierto, I.K tiene montado un show acá.>>
Menudo show, no debi mencionar a alguien tan pintoresco sobre mi cita, porque los pobres trajes de Sid están siendo lanzados por los aires. Uno de ellos, vil proyectil, cae sobre Daire, que se desmorona y encuentra lugar en el piso. Yo me quedo inmovil pensando en cuan molesta situación ha resultado ser esta, la mia. Y cuan gracioso sería que Isabel apareciera ahora. Pero por supuesto, no es una paranoia mia, es una idea que Ella, la tejedora, me ha metido en el subconsciente, para decir riendo entre dientes "no deseo que eso pase....aún." Lynn corre a auxiliar a Daire y nos reprende.
-En vez de estar preocupándose por desordenar un puto armario podrían preocuparse por su amiga.
-Oh, ella lo entenderá -suelta I.K eligiendo un terno del montón. - Hay que hacer arte con este muchacho en muy poco tiempo. ¡MUY POCO!.- Yo no me excuso. ¿Porque habría de hacerlo? Finalmente, no he hecho nada malo. Solo miro a Lynn y la miro con rostro de inocencia.
-Eres un asco de ser humano, Alex. Pese a todo lo que supe de ti, y de tus patologías, siempre lo he creído.- le sonrío mostrandole todos mis asquerosos dientes, mientras ella me descuera con la mirada, arrastrando a Daire a la sala de estar.
-¡Charán! - me expone I.K como la mas inmunda y sublime de sus creaciones a la audiencia.
<<- Si quieres yo la masacro en tu ausencia- escucho en mi mente, y veo a Daire mirandome fijamente.- no te estreses, esta es una situación inofensiva de humanos.- sonríe.>> Me quedo atónito, antes de decidirme, entre balbuceos mentales, por salir.
-Recuerda llegar antes de las 11. El programa de Labraña.
-SI. Recuerda llegar antes porque si vemos un programa muy encendido, hay que ir a ver que tan "encendidas" están las afueras del estudio,si sabes a lo que me refiero.- Interrumpe Pete a Francesca, y me gustaría compartir su emoción, pero estoy molesto.
-Si, si, callense todos. Gracias a I.K y a todos por ridiculizarme como el experimento artístico de turno. Ojalá les caiga el techo encima en mi ausencia.
-NO TE REFERIRÁS A MI.- suelta Daire, poniendose en pie indignada, y empujándome con una fantástica mezcla de furia y droga.
-No, tu eres yo, no te puede caer nada encima.- Y me voy, caramba. Suena música de terror en mi cabeza. Intento espantarla pensando en cuan emocionante programa tendrá Labraña hoy, pero los compases están titilando en todo mi cerebro. Tan preocupado por algo tan insignificante, como la sonrisa misteriosa e inquietante de una mujer que no es Isabel. Dejo que la música me invada, y de pronto, todo mi entorno parece sincronizarse con su ritmo. Todo. Hasta los semáforos, los autos, la sucia gente. Estoy creando cohesión. De la maravilla, río de buena gana en el bus, y la gente voltea a mirarme, toda al mismo tiempo, cuando la sinfonía de mi mente alcanza el clímax. El bus se ha vuelto mi musical personal.
-¡ADIÓS, SINFONÍA DE IDIOTAS!- me despido alegre al bajar y les aplaudo. Me aplaudo a mí tambien. Me voy renovando, dando saltitos, hasta llegar a una esquina, que recuerdo haber visto hoy, pero no recuerdo en que contexto, ni como he llegado aquí... solo recuerdo el láser rojo sobre mi pecho. Busco, y ya no está.Y no se que estoy haciendo en este sitio. ¿Cómo llegue? Miro desorientado a todos lados.
-Da igual.- una áspera y cálida voz suena, y yo, pensando que es mi Tejedora, entro en pánico. Giro bruscamente y me topo con Lydia.- Da igual lo que te estés preguntando. Ya estás acá, y yo también.
-Lydia, hola. Me pillas en desconcierto.. - no sé que decirle. Es que no lleva un vestido amarillo,sino uno rojo.
-Entonces vamos, a ver si en el camino nos encontramos.- Caminamos en un silencio cómodo durante un rato, hasta que rápidamente salta la reja de una casa enorme.
-¿Qué haces?
- Sht, silencio. Sígueme.- por lo general le hubiese gritado, o hubiese protestado o armado una rabieta, pero no. Salto la reja sin problemas, y llegamos al patio de la casa. Es un sitio enorme, e inreíble. Abundan los sauces, y motivado por una nueva sinfonía, camino al compás de los instrumentos de cuerda, y me recuesto bajo un árbol. Lydia se sienta junto a mí.
-Sabía que me seguirías sin protestar. Eres un curioso patológico.
-Bonita sorpresa. ¿Es una emboscada?
-Claro que no. Me gusta este sitió. Sé que es uno de los pocos lugares adonde la Contrainteligencia no puede seguirme.
-¿Seguirte? ¿Te tienen así de vigilada
-Elemental.- saca un cigarrio, y me ofrece otro.- Filtración de información. Por supuesto, no estaba en el contrato, pero como mi servicio es con la sede del MI6, y no de Contrainteligencia, pueden hacer lo que se les de la gana.
-Que terrible. Realmente suena peor que 1984, porque esta mierda es real. Y no comprendo como es posible que exista un organismo con fines de "seguridad política" que crea que la extorsión y la violación de la esfera privada es la mejor alternativa... ¿¡COMO PUEDE ALGUIEN QUERER PRESERVAR ESTA ESTRUCTURA LLENA DE TERMITAS!? ÑARGH.
-Porque quieren manejar todo el poder, tratan de perpetuar su soberanía con el control secreto de todos los aparatos que públicamente parecen libres. Manipulando a su conveniencia.. Alex, ni te imaginas las atrocidades que hacen. La clase alta no tiene porque criticar a este sistema, si se alimentan por él... y claro, los sectores mas necesitados...
-Confían en la caridad. Les han acostumbrado a las sobras de la Máquina, diciéndoles que es lo máximo a lo que pueden aspirar, que la movilidad social es un ensueño. Creen en las cajas de ropita y de comida que vence en dos siglos. Asquerosos. Ojalá sus mansiones de marmol caigan y los asfixien. Y ni siquiera tengan tiempo de comprender, no se lo merecen.- armo mi ansiado mohín, y me siento, molesto, asfixiando a mi cigarrillo de marca, molesto por los pensamientos que corren y galopan por mi cabeza, y no soy capaz de sacarlos todos a lo verbal, hasta que Lydia suelta una risita.- ¿QUE? ¿QUE ES LO GRACIOSO?
- Tú. Es gracioso ver como todo lo que puedes creer de alguien resulta no ser.
-Vaya, no seas estúpida. Los supuestos del otro suelen crearse incluso por ensoñación, porque no hay culpa en idealizar a un desconocido, en esperar algo de un desconocido, ya que, si no aspiras a conocerle, jamás podrán decepcionarte, no podrán romper tus ilusiones, y puedes crear miles de historias sobre el tipo que idealizaste, con total responsabilidad, sin deber explicaciones a nadie. Eso, señorita, es debilidad, y es esperar algo de alguien. Y nunca esperes nada.- Y el sabor de Isabel se me engancha en las amígdalas. Si, soy un cínico.
-Hey, no soy estúpida- oigo molestia en su voz de gato.- Solo interpreté mal al hombre detrás de tus escritos, nada más. Eres un buen camaleón.
-Joder... Si. ni siquiera lo imaginas. Yo tampoco he logrado saber quien soy. Y no dije que eres estupida, dije que no lo seas. La dirección de tus pensamientos aspiraban a ello. Deberías agradecerme por frenarlos. - Y me río de mi grandeza. De pronto vuelvo a ser el ganador, luego de mi mohín. Si no fuese por el sabor de mi garganta, todo iría jodidamente bien.
-Ay, Alex.. lamento decirte que conmigo nunca sabrás si lo que digo es sincero o lo escupo solo para sacar información.- vuelve a sonreír maliciosamente y casi puedo oirla maullar. La odio. Es que no puedo mantener una guerra de miradas con ella.
-Entonces, el disfraz de estúpida no te queda, no conmigo al menos. Mientras te defiendas de mis argumentos, tu puto disfraz se romperá
-Y tal vez eso ya lo sabía... su rostro se vuelve invadido por Dama melancolía.- Tal vez estoy buscando algún escenario donde pueda ser, y no pretender, además de mi propia mente.
-Veo que subestimas y quitas poder a aquel escenario.
-¿Acaso tu te mantienes y eres solo en tu mente?- claro, Galpón Z y Daire me miran con odio, espectantes de mi respuesta.
-Esto no va de mi. Anda.
- Veo que el hombre del disfraz pretende esconder sus propios impedimentos.
-NO LOS TENGO.
-¿Entonces que haces aquí?- no voy a caer en sus laberintos. La Tejedora me ha hecho experto en ellos, asi que...
-EXISTIR. ¿Qué haces tú? ¿Como has llegado a esto?
-Buscando a la mejor forma de sabotear a la manipulación desde adentro.
-¿En el Servicio Secreto Internacional? Es un poco rebuscado como para ser la primera opción de alguien.
-Bien, no deseo hablar de esto.- corta zanjantemente el tema y se gira a mirar a los árboles.
-Se te va a quemar el disfraz eventualmente.
-Yo decidiré cuando será eso.- responde, con una fuerza cautivante.
Hablamos cierto rato más, y noto que está verdaderamente oscuro. ¿Puede pasar tan deprisa el tiempo? "Por supuesto que no. El tiempo pasa siempre igual. ¿Que no recuerdas que tu sangre sigue fluyendo con tamaña lentitud por tu irresponsabilidad para con tu voluntad, para con la Mia?". Comienza a reir, y me pongo en pie de un brinco, viendo la hora en mi celular sin chip. 22:37.
-Eh... debo irme.- suelto a secas, tratando de no mostrar en mi voz la perturbación que genera mi Tejedora.
-Adelante, yo me quedaré acá.
-PUES EXCELENTE.- Avanzo,y doy un par de pasos hacia atrás, hablando por sobre mi hombro.- Eh... ¿te agradaría repetir estem al intento de salida?
-Estaba esperando que lo dijeras-ronronea y sonríe con las pestañas. Maldita sea.
Me niego a subir al bus ante el riesgo inminente de que la Tejedora y Gaspar aparezcan en mi cabeza y me secuestren nuevamente a aquel sitio donde la sangre no fluye, donde todo parece dispersarse. Comienzan a aparecer redes en todas partes, en la acera, las veredas, los faroles, los paraderos... redes entre uno y otro, conectadas, vibrando, y ninguna red pasando a través de mi. << Aun no tengo escrito tu desenlace, mi marioneta predilecta.>> Corro, como si con aquello pudiera desaparecer de mi mente.
-Pasa, te has perdido la mitad del programa.- abre Sid, mirando concentrado a la pantalla, como todos, menos Daire, que parece tener dilemas existenciales. Me siento en el piso a ver el espectáculo.
-Esperen, aún sigue Salamanca, ¿porqué?
-Según me texteó Labraña durante el corte, la entrevista se extendió. Los otros invitados han sido cancelados.
-Así es, me han cancelado.- aparece Astrian desde un rincón.- Saludos cordiales, Alex, se me ha invitado a presenciar el programa con vosotros esta noche.
-Sisi, hola. Los otros invitados están fuera... Osea que no habrá fuego...
-Aun.- observa Daire, saliendo de su estado taciturno y enfocándose en la pantalla.
"-Nosotros, como Gobierno, tenemos la potestad de contar con las Fuerzas Armadas como protección en caso de considerarlo necesario por el bien de la mayoría en los espacios públicos.
-¿Y según qué criterios, exactamente? Digo... ni los medios masivos de comunicación han podido ocultar situaciones en las que usan la coacción "constitucional" de forma... ¿Cómo decirlo? Dudosa.
.Jamás es dudosa, sino necesaria. No sé muy bien a que situaciones te referirás exactamente...
-POR FAVOR. Un Ministro de Defensa sabe bien bajo que situaciones recurrir a todo aquel aparataje de defensa de la imagen política.- Labraña lo mira con un rostro de "detén la farsa" que comienza a prender lentamente la paciencia del para-nada-jipi de Andrés Salamanca.
-Pero hombre, juégatela. Tu eres el entrevistador, y estás haciendo acusación de algo bastante severo via streaming. Has honores a tu sobrenombre, "francotirador", y di a que situaciones te refieres.- Labraña pone cara de ratón malvado.
-Ya que insiiiiiiiiiiiiiiiiiiste. Hace unos días, dentro del marco de las ya conocidas protestas estudiantiles, un grupo de universitarios se tomó la Biblioteca nacional, como forma de crítica directa por dos situaciones que solo agrandaron la brecha de la desigualdad. El Modelo Educativo "alternativo" ineficiente, propuesto por el Gobierno, que parecia, siendo sinceros, una real burla a los años de movilizaciones, y el dificil acceso a la Cutlura a causa de los tratados de Libre Mercado en el que mercancías tan preciadas como los libros se encuentran en Chile casi al 300% de su valor original. ¿Le suena vagamente aquella situación?- Salamanca se pone incómodo y carraspea.
-Eh... si, la recuerdo un poco. ¿Cuál es el punto? Aprende a ir al grano.
-Oh, Andrés, que agrado de invitado, nunca vi a alguien tan ansioso por ser lanzado directamente a los leones. Con sus armas destruyeron mas de la mitad del patrimonio del recinto, además de los textos históricos que se encontraban allí. USTEDES. Y luego, en cadena nacional, culparon a los jóvenes de vandalismo y de ser los causantes de los desmanes.
-Pero aquello si era cierto. Fueron los mismos vándalos los que destruyeron el local.
-No es un "local", señor Ministro. Sería curioso que universitarios con una forma bastante activa de práxis abogaran por mayores aperturas hacia la cultura, a la vez que destruyen algo tan importante como una Biblioteca, ¿verdad?
-Es ciertamente contradictorio, pero fue asi.
-Basta. La entrevistas hechas al mismo personal de la Biblioteca corroboran la versión de que los estudiantes fueron inocentes, y que además fueron brutalmente golpeados,y retenidos dentro del recinto por varias horas.
-Si, de eso estamos al tanto. Se están haciendo investigaciones y sumarios internos para descubrir a los cukpables y que reciban la sanción pertinente. Quiero aprovechar de asegurar a la ciudadanía que nosotros trabajamos para su seguridad, y estamos en contra de medidas agresivas e invasivas.
-Pero...ordenemos esto. Dijo que los estudiantes eran los vándalos, pero tambien asume que fueron golpeados y secuestrados de forma ilegal
-Una cosa no significa directamente la otra.
-Inaudito.- la cara de incomprensión de Labraña supera mi nivel de seriedad y solo me lanzo a reir.- Por lo demás, aprovechando su sincero mensaje hacia la ciduadanía, agresivos son ustedes. ¿Están en contra de ustedes mismos?
-Te equivocas, ya que no es agresividad la que practicamos,sino represión necesaria a queines transgredan abiertamente las leyes y lasl ibertades deontológicas.
-Ah, vaya, no sabía que en el marco político, las palabras como agresividad adquirían otro significado. ¿Tienen real peso estas leyes que mantienen a la gente en descontento? ¿Que perpetuan las desigualdades, que defienden a un modelo insuficiente para toda una sociedad? ¿Y no han pensado que gracias a su actuar extremista surgen estas medidas desesperadas de la gente de ganar terreno ante la oligarquía competitiva, como forma última de protesta ante la crisis de representatividad?- Salamanca mira con agudo desprecio a Labraña, que mantiene su cara usual de niñito burlesco.
-No vamos a abogar a favor del vandalismo ante ninguna circunstancia, ni a aceptar que con la violencia se genere una amistad de parte de la minoría. Actos terroristas solo afectan a gran parte de la población que quiere hacer sus rutinas en calma, y estamos para defender a esa mayoría.
-Mayoría que ya no existe, señor. La rutina está en duda, junto con el gran abanico de temas que generan sometimiento dentro del modelo hegemónico que beneficia a las elites y que mantiene a esa "mayoría" en condiciones precarias,como simples sirvientes mas de los grupos más adinerados y privilegiados por los sectores políticos.
- Si existe, señor Labraña. Es cosa de salir y ver como la gente esforzada se gana el sueldo trabajando.-
-¿Y eso implica que la gente está bien así?
-Pues no se quejan.
-NO LES DEJAN QUEJARSE. Si en vez de apuntarles con un rifle, indagaran,vería que la "minoría terrorista" solo defiende el hastío y la podredumbre ideológica de una mayoría en la marginalidad. Los acuso abiertamente de mentalidad retrógrada.
-No vamos a cambiar nuestro actuar si ha sido eficiente para preservar el orden, y no le recomiendo ser un instigador, con sus discursos subversivos y sus falsas perspectivas en cuando a un modelo político y económico que se ha sustentado por décadas.- Labraña levanta los hombros con irreverencia.
-Soy el Francotirador, pero ¿quién tiene las armas? Gracias por venir a darnos su postura afirmativa por la violencia institucionalizada.- Salamanca se despide desganado y se va refunfuñando.- Bien, este ha sido el programa de hoy. Lamentablemente, escuchando el discursito de la nueva Derecha Fascista perdimos tiempo de tener a otros invitados, que nos acompañarán el día de mañana. El psiquiatra y Ministro de Salud, Arturo Santa Cruz en compañía de Nicholas Astrian y la dirigenta de los sindicatos de trabajadores, Catalina Farías! Descansen, y hasta la próxima transmisión."
Sid desconecta el notebook de la pantalla de TV y todos estamos impactados mirando hacia el televisor apagado. Así que el francotirador.. una nueva figura en este tablero de Ajedrez.
-Hay que encontrar la forma de que este programa tenga una cantidad de seguidores más masiva, en vez de seguir y degustar la papilla informativa.- observa I.K, y se pone en pie.
-Imaginen esto- suelta Astrian con rostro de visionario maniaco-, además de tener más llegada, nuestra práxis tendría apoyo y respaldo, y ya no seríamos solo unos cuantos con cierta influencia.
-Si.. yo creo... que Arturo... podría hacer algo, promocionar su entrevista...- duda Francesca, antes de guardar silencio y caminar dando pasitos hacia su habitación.
-Que vengan mañana Labraña y Sir. Hay que planear bombazos para el mejor espectáculo informativo jamás visto.- dice Daire, desde su trono.
-Mañana... tengo algo que hacer.- digo lo que pienso sin darme cuenta. Me miran, esperando a que responda,supongo.- NO RESPONDO A LENGUAJE KINÉSICO.
-Ya, ya. ¿Que vas a hacer, señor misterio?
-Que cabreada estás Daire. Creí que me querrías acompañar a llenar de piedras la puta casa de Salamanca.
-NO.- responde, tosca, y se va. Bien, no son días fáciles, no tengo interés de seguirla y rogar. Pero me niego a caer en la inercia.
-Yo tengo piedras, ladrillos, brazos, y mucha rabia. MUCHA.- Salta Pete y patea unos vasos que estában en el suelo.
-Traten de llegar antes de las 3.- vuelve Sid con su celular en mano.-Acabo de llamar a Labraña y a Arturo, es importante que nos preparemos de buena forma para planear nuestra salida a la luz pública luego del programa de mañana.
Me quedo reflexionando sobre la complejidad del escenario. Tal vez, luego de la aparición de Catalina Farías, las cosas cambien. Consciente estoy de que nadie puede ser feliz con el basural de sistema que nos venden como "la vida" desde que nacemos,pero dificil es salir del estado de pereza.
<<Mira que precioso laberinto, Alex. ¿Cómo saldrás de éste?>> En la penumbra, descubro que estoy solo en la sala de estar, apenas respirando. Me vuelve a invadir el deseo de acabar con todo. Algo me dice que este camino hacia el sabotaje final no es el único, no es el mío, y estar fuera de sitio me desquicia, me hace querer arrancarme el pellejo. Acabar con todo, con todo de mí. Caigo en la desesperación, el laberinto está lleno de sangre, lleno de todos los cadáveres que llevan mi nombre y mis creativos afanes de carnicero. De pronto el sabor dulce de Isabel y su imagen luminosa comienzan a erosionarme el esófago. Me pongo en pie, desesperado, y temblando, cojo unos cuantos somníferos y una botella de vodka. Nada extremo, solo para dormir y no soñar con ella, o para ignorar el nuevo laberinto que mi Tejedora me ha construído. De Lydia ya ni me acuerdo.
Espera, ahora si. Joder
Despierto porque siento que alguien me zamarrea y golpea con fuerza. Pestañeo varias veces, hasta lograr reaccionar y distingo que es Daire, furiosa, gritando.
-¿Ah? ¿que pasa?
-¿AH? ¿ES EN SERIO? ¿QUE MIERDA TE PASA?
-¿Porque?- me giro lentamente y me estiro, relajado, antes de ver el vómito que hay junto a mi comoda cama-piso.
-Bonita mezcla se te ha ocurrido, maldito idiota.
-Quería dormir sin tener pesadillas.
-¿Y NO PREFIERES UN MARTILLAZO EN LA PUTA CABEZA?
-Pues si tu puedes darmelo, te lo agradecería enormemente jajajaja.- sus ojos hierven y me hierve a mí con la mirada.- Ya, no seas tan emocional, estoy bien, mira.- trato de ponerme en pie y vomito nuevamente, sobre sus botines. Ella suspira, controlándose.
-Vuelves a hacer esto,y ruega porque te mueras, o te voy a matar yo.- se acerca demasiado, amenazante, como una hermosa bola de fuego.- Y no es broma, y creeme, no sera como "no tener pesadillas".- Se da media vuelta, brusca, y se va, a lo que Pete se me acerca y me tiende una mano para ayudarme a ponerme en pie.
-Es sin duda la mujer más dulce del mundo al mostrar preocupación.- agrega. - ¿Estás bien? ¿Iremos?
-Claro que estoy bien, yo siempre estoy bien. Iremos enseguida, permiteme asearme, deseo ir presentable a mi espectáculo.- Soy un ejemplo de limpieza.
Al llegar con Pete a la mansión de Salamanca, ya estamos molestos. Resulta indigno el tamaño de sus "hogares", resulta innecesario. Este mundo es una realidad objetivada que no logro compernder. <<Todavía, ya pronto todas las cuerdas estarán en su lugar.>>
-Esta mierda parece un puto museo.
-Debe estar lleno de reliquias militares... y de perímetros policiales. Ven, hay que rodear el perímetro..
-Allá. - apunta Pete, a lo lejos. A un árbol.- ES PERFECTO.- sube con gran agilidad.- Da a un punto ciego. Gracias.- y le da un abrazo a la rama que le sostiene.
-Nada de gracias. Pobre de ti si te mueves de este sitio, conozco a los de tu especie- le susurro al árbol antes de subir.
-Ahora...-Pete entrecierra los ojos, para activar su visión de águila, supongo.- Veremos... si hay alguien...- Guarda silencio durante un rato y empiezo a perder la paciencia. Del aburrimiento, cojo un ladrillo y con excelente fuerza y precisión, lo tiro hacia un ventanal.
-¿¡QUE HACES!?- Sale un mayordomo con cara de pánico y locura por una ventana.
-¿Ves? Estabas buscando si hay alguien, y hay alguien. RÁPIDO. ¡TIRA!- proque probablemente Don pánico va a llamar a la policía. Tiramos todo nuestro arsenal, y de paso, un par de ramas, posterior aprobación del árbol. El estruendo de la lluvia de proyectiles fue divino. Ventanales rotos, tejas regadas, paredes hundidas por montones. Bajamos del árbol riendo, y yo me siento recargado, no sé si por el árbol o por el exceso de adrenalina. Interrumpiendo nuestra gloria, escuchamos a lo lejos una patrulla. Tiramos nuestros abrigos a un jardín cualquiera, nos miramos, asentimos, y al llegar a una esquina tratando de pasar desapercibidos, echamos a correr. Calles mas abajo, un policía abajo de la patrulla empieza a seguirnos.
-WARF, WARF.- Aullámos. Me aburro de correr, y con el cuchillo rompo una montonera de bolsas de basura colgadas de una reja. El policía torpe, se tropieza, y le sacamos suficiente ventaja como para saltar hacia una micro y desaparecer, con la imagen de aquel gordito policía rodeado de basura. Perfecta metáfora.
-Uffff, tengo tanta adrenalina que mi sangre curaría un shock anafiláctico- resopla Pete.
-Ah...somos unos vándalos. Y unos putos dioses, pero eso no te quita lo jipi. Mira que abrazar a un árbol...- lo miro con burlesca reprobación, miestras que mi subconsciente realmente extrañaba ese momento. Mis únicas relaciones con los árboles hasta hace poco eran bajar a Daire de ellos, tironeándola.
La micro abre sus puertas mucho antes de frenar. Me cuelgo de la puerta, y vuelo hacia la acera, cayendo de pie en una perfecta pirueta, a lo que Pete me aplaude. Es mi perfecto payaso, me aplaude y me alaba, sin cuestionar. Respondo con una sublime reverencia.
-Hombre, que aquella reverencia te ha salido igual a Gaspar.- De pronto, comienzo a ver como el laberinto de letras y cuerdas se aparece, y me desquicia. Escucho a lo lejos a Pete preguntando si estoy bien. Lo cojo de un brazo y echo a andar por el laberinto hasta llegar a Galpón Z. Se supone que es la salida del lío.
Pero claro, la casa tiene cara de preocupación, así que supongo que el ambiente adentro es digno de una úlcera. Entre la reja y la puerta alcanzamos a inflar varios globos.
-Buena tarde. Hemos llegado puntuales a imponer presencia.
-Y GLOBOS.- Salta Pete y los tira, pero todos nos miran, acediosos,y vuelven a su preocupación, que parece tener de receptor último a Labraña. Me acerco a el, y le saludo con la mano, mientras el sigue de perfil, mirandome con un solo ojo.
-Maxi, ¿pasa algo?- El responde, preocupado, pasandose la mano por la boca, pero sin mirarme de frente.
-Si, Alex. Recibí una visita cordial de la facción armada de Informática de Contrainteligencia esta mañana.
-Una amenaza, ¿verdad? De estos bastardos, porque mierda...
-Los envió Salamanca, de seguro. Encontraron algunos cargos de espionaje por acceder a la deep web a conseguir información, pero eso fue la excusa, y ellos me lo revelaron abiertamente...
-Una visita muy social, me imagino. ¿Tomaron te de manzanilla?- Harto, voltea a mirarme y me muestra su rostro. La mitad antes escondida se presenta ante mí.La carne viva, bastante destrozada. La sangrecita aún corriendo y un hematoma morado por ojo. Es tan....real, que me quedo atónino.
-Ya sé lo que estás pensando.- Se acerca Daire, pasa sus deditos por mi hombro antes de sentarse junto a Labraña y apoyar su rostro en el hombro del herido..- Bueno,piensas dos cosas. Que parece dos caras, y que su ojo es una monada.
-No pensaba eso. TU NO ESTÁS EN MI MENTE.
-Claro que lo pensabas.- sonríe antes de volver a apoyarse en el hombro del Francotirador.
-NO.- SI, EN VERDAD SI. Pero Daire no está en el laberinto... ¿O si? No puede. En el laberinto solo está la Tejedora...
-¿Nadie ha pensado en como hará el programa hoy? ¡No puede salir esto en los medios o lo matarán! - Exclama Sid, escandalizado.
-Al contrario... hay que acusarlo y usar el medio... Quizas cuantos más han planeado algo así de grande como el programa de hoy.. y han sufrido este nivel de amedrentamiento... y deciden...pues, guardar silencio.- es Francesca, ella si sabe de cobardía y de guardar silencio. Se acerca decidida a Labraña, con un botiquín.- Si no te molesta, yo puedo hacer de entrevistadora hoy. Se escabullirme y ser invisible.
-Eh... disculpa, pero ¿quién eres?
-Francesca.- yo que ella me ofendía, el tipo ya la había visto.
-Claro, ya te recuerdo, disculpa.- Coje unas hojas de su maletín y deja marcas de sangre con sus dedos en ellas.- Este es el libreto de hoy... esto es una gran responsabilidad, Francesca, ¿estás segura?
-Creo, Maximiliano, que deberemos ordenar bien esto en privado.- dice ella, aparentando seguridad y decisión.
-Mmmmh... no des tu verdadera identidad. Desagradable sería que a causa mía te llegase una cordial visita terrorista...
-Oh...pero no sería a causa tuya, sino de ellos.
-DE ESOS ASQUEROSOS PERROS FALDEROS. JODEOS. Labraña,hiciste el primer ataque certero y mira como respondieron, casi igualando el juego a nuestra práxis taaaaaan criticada por vosotros. Hay que generar ataques masivos sin miedo a las consecuencias, esto tiene que parar, o lo pararemos nosotros.- grita Daire mientras golpea la mesita de centro con el hacha. Luego suspira con melancolía y se retira, sin mirar a nadie, abandonando el hacha, hacia el Laboratorio. Martín, sigiloso, la sigue. ¿Qué le pasa? Los sigo tambien guardando mi sigilo tipo zarigüeya, y los escucho murmurando.
-Creí que el Laboratorio estaba en cuarentena o algo asi, has hecho un buen trabajo con las instalaciones de emergencia química, Martín.- entro y observo alrededor, como si hubiese pasado mucho tiempo. Martín y Daire guardan silencio al verme entrar y se miran, sospechosos.- Vamos, ¿Un secreto, Daire? ¿de verdad? - ella, muda, duda en su actuar durante unos instantes, y solo me apunta hacia el piso, adonde derramó los compuestos el día que apareció Isabel.
"N,N-dimetiltriptamina" junto con un dibujo que parece ser de nomenclatura.
-¿Que significa? no entiendo.
-Yo tampoco.- escupe Daire, preocupada.- Es que no recuerdo nada de esto, ni siquiera sé lo que significa.
-Algo debes recordar.-Me planto frente a ella y la tomo por los hombros. - Yo se que puedes.- Ella me mira, atemorizada.
- Solo recuerdo que estaba en otro sitio, mentalmente, no puedo explicarlo bien... pero había un laberinto. Y me dijeron que esta era la respuesta.- Martín aparece con una esponja empapada, dispuesto a borrar los residuos de ese día.
-¿Como? ¿los vas a borrar sin que sepamos que es?
-Alex, ya lo se. Es DMT.
Abro los ojos de lo que parece ser una siesta reparadora. Por primera vez en mucho tiempo, no recuerdo lo que he soñado, lo cual no se si es bueno o malo,o solo es, pero mi estado mental de calma, me dice que debo relajarme. Me estiro en la cama con desarraigo, ilusionado con que tal vez Isabel si se aparezca hoy. De golpe, entra una mujer a mi habitación, pero no, no es Isabel, es I.K, junto a Pete, irrumpiendo en mi paz, generando un huracán.
-Alex, debes esconderte A-HO-RA.- dice Pete tratando de ponerme en pie, a lo que le empujo contra la puerta, y bostezo. Veo a Daire, observando abstraida hacia la puerta principal. Me mira.
<<-Intento hacerlos estallar.
-¿A quienes?>>
-Alex, vamos, no querrás que te vuelvan a encerrar.
-I.K, no me cabrees,¿porqué habrían de encerrarme esta vez?- Ella y Pete se miran, sin comprender.
-¿Cómo? ¿no recuerdas?
-¿Qué cosa? no creo que se me vaya a castigar por no recordar lo que he soñado.- me estiro, relajado. Es que me siento bien, libre de tanta presión. De pronto, Daire entra y me saca de un tirón de la habitación, para llevarme por la escalerita secreta hacia la azotea oculta. Con una sola señal me ordena que guarde silencio.
-Joder, Daire, espero silencio de cualquiera, menos de tí.
-¿Y se puede saber que es lo que esperas de mi?- balbuceo, y guardo silencio. Finalmente, le hago caso. Saca sigilosa algo enrojecido de su bolsillo, y lo observa, ceremoniosa y concentrada. Lo roza por su rostro mientras una sonrisa germina. Sangre a medio camino de secarse, eso es. Me tira el objeto. Es un guante.
-Presumo que no recuerdas que llegaste con estos guantes puestos, gritando que habia sido sublime visita a la mansión de Salamanca.
-¿Que? Pero...yo estaba...estaba durmiendo. ESTABA DESCANSANDO.- hiperventilo de forma histerica.- Deperté relajado, esto es mentira, no puede ser.- comienzo a temblar, y a escuchar carcajadas en mi cabeza, no comprendo como se está tejiendo esto, y caigo en pánico. Busco desesperado algo que romper, pero solo veo a Daire. La orquesta comienza a sonar en mi cabeza al ritmo de la desesperación. Más rápido.
Daire abre la boca, y notas de un oboe dulce y suave emergen, me pierdo observándolas, cuando se acerca y pone su mano ensangrentada sobre la mia.
-Todo va a salir bien, tranquilo.- Solo la miro, perturbado, y asiento. Trato de recordar, y no pasa nada, dentro de mi cabeza solo suenan risas al final del laberinto.
-Se han ido hace un rato ya. Bajemos.- interrumpe Daire mis intentos de hacerme una regresión consciente.
-Guau, adorable, Daire, definitivamente, la sangre va contigo.- se acerca I.K claramente tratando de liberar la tensión del ambiente
-Por favor,la sangre va con todo, más respeto- responde de forma encantadora. Soy incapaz de moverme por mi cuenta, el sonido de mi corazón opaca todo sonido ambiente. El pánico me ha invadido al punto de la catarsis. Daire se da cuenta, se acerca, vuelve a tomarme de la mano, y solo me mira a los ojos. Pero no puedo mantener la vista fija sin querer romper algo, y no quiero romperla a ella.
-POR LA MIERDA, deja de mirarme así. Hasta hace unas horas ni siquiera me mirabas, deja de hacerlo.
-Tal vez necesitaba de esto para despertar. Gracias. - La sangre brilla en su rostro, no tanto como sus ojos. Y no me suelta la mano.- Sid.- se dirige a hablarle a él.- ¿que pasó?
-Bueno.. nada realmente. Fuera de riesgo. Han pasado preguntando si hemos visto a algun tipo sospechoso de abrigo largo y con claras señales de haber cometido asesinato. Pregunté rasgos físicos, y no tienen nada claro. Pero tenemos otro trabajo que hacer ahora. Y es evitar que los acontecimientos, sean cuales fueran, en casa de Salamanca, se asocien a Labraña.
-Yo ya estoy lista.- dice Francesca, aparentando nuevamente seguridad. Todos están actuando de forma tan extraña, que dudo de si esto está realmente pasando, o nunca desperté, y por eso no recordaba haber soñado. Cojo un cuchillito hermoso invocándome y me corto el rostro.
-Alex, eso no es una máscara.- dice Pete, serio, y me quita el arma. Esto es asqueroso,pareciera que todos tienen claro su movimiento en el tablero para hoy, y yo sigo siendo una pieza con dos bandos, que se ha autoexcluído. Todos me miran.
-QUE LES PASA. NO SOY SU MASCOTITA. NO ME MIREN CON LÁSTIMA.
-CALLA DE UNA PUTA VEZ.- resuena el oboe, furioso, apretando con furia mi mano- ¿que no ves que pese a todo el movimiento y las órbitas de esto, importas? ¿no vale nada?-ahora Daire ha sonado exactamente igual a Isabel. ¿Que realidad es esta?
-MIERDA. - Sid arroja su celular volador.- Los medios están ganando terreno con los acontecimientos... esto
no debería pasar. Francesca,coje tus papeles, iremos a reunirnos con Labraña. Espérame en el auto.- ella asiente y se va al auto, obediente.- Daire, supongo que te quedarás acá con Alex.
-Así parece, he de quedarme con Don-Libertad-no-necesito-a-nadie.
-Bueno, bueno, te tengo una tarea informática mientras tanto. ¿Qué tanto sabes de la deep web?
-Oh...lo suficiente.
-Allí tienes mi notebook, tienes una labor en cuanto a sacar información como respaldo al programa de hoy. Esto tienes que hacer.-
Todo se mueve rapidísimo para mi capacidad de atención en catarsis. Cuando pestañeo y abro los ojos, descubro que todos se han ido ya a cumplir con su participación en el juego de esta noche.
-Alex...calma. Esto era necesario. No hay punto de acuerdo entre lo que sea que se fragmente. No lo intentes.- El oboe de Daire logra calmarme,hasta que se escucha una voz femenina fuera del Galpón Z,llamando. Daire gira, y avanza con furia hacia la reja, acompañada de su hacha.
-Espía de mierda. ¿CÓMO LLEGASTE AQUÍ?
Continuará.
Pages
Delirio: el ser no es (VI).
miércoles, 12 de febrero de 2014
Condimento del Vomito:
Delirio: el ser no es,
Gwÿnt
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Concierto de Tripas.
Obras por Autores
Los más digeridos
-
Siento una impotencia enorme, estoy totalmente emputecido por las tecno-barbaridades.. Casi una semana sin un puto Computador y te olvidan ...
-
Bienvenida Sangrienta Malvenida: Cuarto Movimiento: Quinto Capitulo El Laberinto Hemos llegado finalmente a la recta final, sera e...
-
La ultima y definitiva deformación-modificación esta aqui Ya no hará falta otra visita a este lugar.
-
Publicado por Joker Vön KA "Jok" Dicen que una desgracia nunca viene sola. Me gustaría explicar que es lo que realmente ocurre, po...
-
Bienvenida Sangrienta Malvenida: Tercer Movimiento: Parte trece y Final del movimiento. Por: Prometeo Contemplo con serenidad e...
-
Esto me da satisfacción, me desestreza, me anima, y la mejor parte es cuando termino el trabajo, por las noches, cuando su tronco qued...
-
Por: Prometeo Debido a que el blog crece de a poco y seguirá creciendo, me parece una buena iniciativa colocar una serie de recomendaciones,...
-
La melancolía de estos días me tiene atadas las manos trae recuerdos amargos que me traspasan el cráneo me hieren como cuando traían casti...
-
Dejar ir Somos un instrumento más En esta gigantesca sinfonía Encontrar la sintonía Esa vibrante armonía Es un precioso regalo ...
-
nfsdjksd Y djfddf decia hdfgds Asi : " jnsdvjn ojala kjsdfjd poder kjdfnkd morir sdkjfkjsd dos jdksf kjds veces nksdnf " kb f...
0 comentarios:
Publicar un comentario