No hay salvación, ni redención, no hay progreso ni avance,
solo naipes puestos uno sobre otro en una mesa con una pata coja. Cualquier
cosa, en cualquier momento y de cualquier forma te arrancara de cuajo el
cerebro, el corazón, el hígado y el pene. Y no seras mas que
basura orgánica desparramada por el pavimento, la obra de arte
suprema, el fin inevitable, los ojos de los espectadores abiertos como platos,
gritos, sudores helados, llantos, todos los espectadores repletos de la envidia
mas insana. Las especies que pisoteaste en tus días de gloria,
se darán un festín de tu cuerpo mutilado, acabaran por
hacerte un favor, pues toda obra de arte que no se destruye en un determinado
periodo se vuelve una ridícula iglesia. Algo se asemeja a una sonrisa
en tu pálida y muerta cara, carcomida y repleta de gusanos que bailan
en tus interiores y en la superficie de tu piel, donde antaño,
se acumulaba el calor de un par de abrazos que se perdieron para
siempre en el estomago de mil insectos. De tu muerte viven, de tu muerte se
condenan a si mismos y su perdición, no sera otra cosa que el inevitable
destino y la maldición unida a una eterna cadena causal. Eres parte
activa de la cadena maldita, vives maldito creyéndote bendito, y
tu perdición, inevitable, es el traspaso de
la maldición eterna, eres un mero conducto a
una maldición que esta mas allá de ti.
No hay salvación, ni redención, no hay
progreso ni avance, solo naipes puestos uno sobre otro en una mesa con una pata
coja. ¿Cual es la vida que quieres vivir? tac tac, la mesa se tambalea ¿Que
esperas hacer de tu vida? tac tac, la mesa se vuelve a tambalear, las cartas
parecen a salvo ¿Cual es tu meta ultima? tac tac, se cae un par de cartas de la
parte superior, ha sido solo un susto, nada que no se pueda reparar
¿Que haré cuando termine el castillo? tac tac ¿ Viviré en
el? tac tac ¿Esposa e hijos? tac tac ¿Un trabajo digno para acumular mil
tesoros que me acompañaran hasta mi lejano lecho de muerte? tac tac tac tac
tac. La mesa se cae al piso y la torre se desploma por completo, eres ya
basura orgánica desparramada por el pavimento. Cualquier cosa,
en cualquier momento y de cualquier forma te arrancara de cuajo el cerebro,
el corazón, el hígado y. el pene. ¿Y tu? tac tac
¿Puedes oírlo? tac tac ¿Notas el sonido de tu mesita tambaleándose?
tac tac ¿Y tu? tac tac ¿Como desperdiciaras tu vida el día de hoy?
tac tac tac tac tac.
No hay salvación, ni redención, no hay
progreso ni avance, solo naipes puestos uno sobre otro en una mesa con una pata
coja. Estamos malditos, todos y cada uno, somos el túnel que recorre
la eterna sangrienta desgracia, cada día nacen mas de mil anticristos sedientos de dolor propio y ajeno,
cada día alguien tira el televisor por la ventana a
un transeúnte despistado, cada día un genio decide quemar
todas sus obras y pintar la pared con sus propios intestinos,
cada día alguien decide desperdiciar total y completamente su vida,
pues se ha enterado de la verdad. Sea nuestra condena nuestro estandarte, somos
la mesa de pata coja que se dedica a rechinar y empujar al resto de las mesas
repletas de castillitos de naipes. Somos insignia de nuestra maldición,
somos los que decidieron desperdiciar su vida, pues toda vida acaba en un
desperdicio inevitable. Cualquier cosa, en cualquier momento y de
cualquier forma te arrancara de cuajo el cerebro, el corazón,
el hígado y el pene.
¿Y tu? tac tac tac tac tac ¿Como desperdiciaras
tu vida el día de hoy? tac tac tac tac.
No hay salvación, ni redención, no hay
progreso ni avance, solo naipes puestos uno sobre otro en una mesa con una pata
coja.
Franz
Magritte