Sangrienta Malvenida ha llegado a el inframundo y de una patada ha abierto el Tartaro, liberando toda clase de escupitajos de sinceridad, disparates encerrados por una eternidad, luces y sombras de historias contadas que jamas fueron oídas. Sangrienta Malvenida le ha dado una oportunidad a toda ese mundo encerrado entre Occipital y Frontal, Parietal y Temporal. Ese mundo caótico deseoso de adquirir vida propia, acaba de hallar una nueva oportunidad. Sangrienta Malvenida no sabe que lo ha hecho, pero lo ha hecho.

Aquí empieza la función!

lunes, 24 de junio de 2013

Junio 24


Llegué hoy y te busqué, pero no estabas. En realidad sí estabas, pero no te vi. En realidad sí te vi, pero no me miraste. En realidad sí miraste, pero no sonreíste. En realidad sí sonreíste, pero no te vi hacerlo. En realidad no te vi hacerlo, pero sentí que lo hiciste. En realidad, no sé si lo sentí, pero lo imaginé. En realidad, no lo imaginé, mejor dicho lo recordé. En realidad, recordé cuando sonreías después de que te miraba y te dabas cuenta de que lo estaba haciendo, porque me era inevitable detenerme a mirarte cuando sabía que estabas ahí, y me premiabas con ese gesto, por haber notado tu presencia.

Dr Verdugo

¡Vuelve!


Ya respiré lo suficiente, ahora me estoy ahogando de tanto aire. La ausencia de un ser amado, que por mucho tiempo pensé que estaba destinado a estar conmigo, no me causa ningún tipo de gracia. Te tuve y te desperdicié, por el simple hecho de creerme más de lo que soy. Se transformó, no sé en qué momento, en una batalla de mi ego contra tu presencia. Ahora quiero que vuelvas y no estás. Sí estás, pero no como yo quisiera. Un egoísmo de proporciones. Cuando te libraste de mi omnipresencia, se destapó el mundo exterior, las múltiples tentaciones hermosas y banales que yo también supe probar. El mundo no está equilibrando nuestra mentes, así como lo hacía antes. Tu negro, yo blanco. Tú A, yo Z. Desesperación por volver a armonizar nuestras vidas, con un final juntos. Forzar la realidad. Dar todo lo que está en mis manos imaginarias, en mis riendas espirituales, para que esta vida no nos separe ni nos dejé irnos por el camino de el vacío interpersonal. Lo peor es cuando estás hablando la verdad, porque siempre lo haces. Soy yo el maldito imbécil que no acepta las verdades, que se cree tan fuerte como para poder rechazar una verdad absoluta. Mi locura continúa en crecimiento. Con el paso de las horas hay momentos de calma, pero la próxima tempestad es peor y peor y peor. Te veo en cada desgraciada imagen que se cruza en lo que mi mirada capta. Ahí estás tú, te veo, te siento, estirando tu mano, aquella, la más suave que ha cruzado la mía. ¡No te vayas! Te grito, como si escucharas a mi mente hacerlo. Seguiré haciéndolo, porque hay una locura de amor, y sé que las locuras de amor son aceptadas socialmente. Nada seguro de que se cumpla, nada seguro que provoque algún efecto benigno.


Dr Verdugo

Concierto de Tripas.


MusicPlaylistView Profile
Create a playlist at MixPod.com