Bienvenida Sangrienta Malvenida

Bienvenida Sangrienta Malvenida: Tercer Movimiento: Quinta Parte o Tejido causal.

Por: Prometeo


- ¡Sofia! ¿Estas bien? Me tenias preocupado- escucho a través de un teléfono que me han entregado los Maníacos.
-Si, todo en orden, quédate tranquilo Hernando...-le respondo tratando de controlar mi tono- llamaba para avisarte que estoy bien... han ocurrido un par de cosas... hablaremos en cuanto nos veamos, hoy me quedare aquí...-
-¿En la fabrica? ¿Estas segura que estas bien?- insiste.
-Si, todo va bien...- mentirosa- te prometo que me pasare mañana
-Bien, nos veremos entonces...-
-Me tengo que ir ahora...-
-Te quiero...- suena la otra voz por el teléfono.
-Yo también... adiós- Cuelgo y regreso a la habitación con Kain.

-¿Todo va bien? ¿Estas lista?- me pregunta. Me siento frente a el, en el piso, y miro un jarro con el liquido verdoso.
-Creo que estoy lista... un poco nerviosa, pero preparada-le respondo.
-Estaré contigo en caso de cualquier complicación- me dice. Tomo el jarro entre mis manos y lo acerco a mi boca. Comienzo a beberlo lentamente, el sabor es repulsivo.

- Oh Diosa Libertad, toma entre tus brazos a tu seguidor,guía su voluntad a través de los mares del innombrable deseo,que la luz de la verdad barra con la falsedad implantada en esa conciencia,que su corazón vuelva a latir tan profundamente como lo hace tu existencia trascendental

He vaciado el jarro, tengo una horrible sensación de nauseas, coloco mi cabeza en la cubeta esperando la explosión. Y ahí viene, el vomito sale a chorros mientras el recuerdo de los días de angustia luego de la partida de Laura regresa a mi cabeza. Todos los pantanos en mi interior luchan por salir.

-Vuela libre, vuela al susurro de tu verdadera eternidad...

Cierro los ojos y me acuesto en el piso, siento que esta lleno de agua, comienzo poco a poco a hundirme, hasta que quedo completamente sumergida. Abro los ojos.


Veo la calle empedrada de mi viejo pueblo. Estoy sobre una roca y junto a mi esta Laura. Creo que esto lo recuerdo...
- Esto lo tienes que recordar, querida mía, tu si entiendes. La única manera de reafirmar la voluntad es siendo quien verdaderamente eres. ¿Que sentido tiene el prolongar la existencia para construirte como algo que no eres? Cuando acaban siendo lo que no son, pasa esto, el mundo se degrada. Y así la moral se hegemoniza, y así te apuntan con el dedo por ser quien verdaderamente eres. Se han enceguecido tanto en la comodidad que han decidido ocultar la verdad para no sentirse culpables. Así  sus normas de cortesía se fundan en la hipocresía  esta gente convierte la mentira en un estilo de vida. Tienen miedo y por eso delegan ya no solo su poder, si no el pensar mismo. Se pavonean pidiendo una verdad con gestos angustiantes, y si les entregan una mentira en forma de cruz o monedas, no notan la diferencia. Al final, se pierden con tanta facilidad por que no tienen la menor idea de lo que buscan... Cuando tranzamos nuestra naturaleza por alienarnos, adaptarnos a determinado medio, lo único que hacemos es trastocar nuestra identidad. Tu tienes que ser lo que realmente eres, has de ser tu propio deseo, inclinación  aquello que se impulsa desde tu núcleo de esencialidad, como voluntad. No hay que hundirse en la mentira, en el fingir, hay que decir lo que es necesario ser dicho, y hacer lo que es necesario que se haga. Y eso solo lo determina tu voluntad y tu desenvolvimiento en la potencialidad. Del núcleo de tu ser, los impulsos de tu deseo te indicaran hacia donde ir.

Me empieza a faltar el aire, trato de nadar en busca de la superficie para poder respirar, una vez que lo consigo, noto que estoy en un oasis. Alcanzo la orilla y salgo del agua. Puedo escuchar un llanto a la lejanía  Me suena tan familiar. Trato de correr en la dirección desde donde los escucho. Muy lejos, en pleno desierto, veo la figura de una mujer, de rodillas y con las manos cubriendo su rostro, a unos metros de ella, un hombre de pie. A medida que me voy acercando puedo distinguirla, el llanto esta teñido de angustia y desesperación abismal. Es Laura. Gustav esta junto a ella. Pareciese que no pueden verme. Comienza a llover, siento el agua en mi piel.

Puedo ver manchas de sangre por la habitación. Tengo un cuchillo en mis manos. Esteban empuña otro cuchillo, y frente a nosotros puedo ver a un hombre con los ojos inyectados y una amplia sonrisa. La hoja de su cuchillo tiene sangre. Puedo ver varios cortes en mi piel, la ropa de Esteban y el otro tipo indican que también han sido heridos. El tipo de ojos inyectados se lanza a toda velocidad contra Esteban que agilmente le esquiva, contra-atacando. El tipo de los ojos inyectados es tremendamente veloz, ha bloqueado con facilidad el ataque de Esteban. 
-No se como pueden resistir tanto, deben entender que es tiempo perdido...- dijo el tipo- nadie escapa del filo de mi cuchillo, yo soy la muerte.

Cuando la lluvia termina, puedo ver como el desierto se ha convertido en un inmenso campo repleto de vegetación.  Numerosos y frondosos arboles se han levantado. Tras uno, puedo ver como una figura femenina sale. ¿Soy yo?

-¿No crees que ya ha sido demasiado? ¿No crees que es tiempo de dejar de comportarte como una cobarde?- me dice mientras se me acerca- Llevas tanto tiempo huyendo de ti misma, de lo que eres y deseas...
-Es que no es fácil...-
-¡Claro que no es fácil! ¿No te parece bastante mediocre tu excusa?  Esa actitud, empujada por esa autoestima con oficio trabajadora de las profundidades, solo ha conseguido hacer de nuestra vida una caricatura. ¿Te imaginas nuestra vida acabara luego de estas palabras? ¿Que pasaría si eres el producto de un sueño, y el soñante se despierta ahora mismo, así sin mas? ¿Habría valido la pena vivir como vivimos? Nos hemos acostumbrado tanto a vivir, que casi damos por hecho que lo haremos por mucho tiempo mas. Pero no, tu jodida hora puede llegar en cualquier instante y no hay forma de que lo sepas. ¿Como pasar entonces, los que pueden ser nuestros últimos instantes, haciendo algo que realmente no queremos, que no nos motiva, que nos deja en la mas repugnante de las sobriedades indiferentes? Esto se ha extendido por mucho, es momento de que despiertes de una vez por todas.- se acerca hasta a mi, y me da un abrazo.

Numerosas imágenes pasan por mis ojos, Laura, el humo en REM y el rostro de Esteban, numerosas personas corren de un lado a otro, varios con banderas y gritando consignas de libertad, la policía se viene sobre el lugar. Algunas personas caen al piso, puedo ver fuego y numerosa gente detenida escapa de los gigantescos vehículos policiales. Estoy en la oficina de Hernando, parece fuera de si, me da un puñetazo y saca una pistola con la que me apunta. Escucho un disparo. Un hombre cuyo rostro no conozco, de abrigo naranjo se me acerca y me entrega un jarro con el liquido verdoso, con un tinte mucho mas oscuro, y de apariencia mucho mas espesa. Me pasa una de las raíces en la mano. Estoy sobre el edificio mas alto del país, la ciudad arde.

-De ahora en adelante, no podrás escapar de ti misma- escucho en mi oído, es mi propia voz. Mi cabeza comienza a retumbar con fuerza, me duele mucho, apenas aguanto. Abro los ojos y frente a mi veo una caída libre, numerosos pasillos del inmenso edificio repleto por hombres y mujeres de túnicas naranjas. A mi lado veo a Esteban.
-Saltemos.- Me mira y asiente, lo tomo de la mano. Saltamos. Cuando voy a llegar al piso el mundo completo se convierte en agua. Me estrello en el agua y me hundo, me pierdo, soy una gota mas en el océano.


Abro los ojos, estoy completamente empapada en sudor. Estoy en la cama, junto a mi, en una silla, duerme Kain. Cuando voy a tocarle el hombro para que despierte, abre los ojos rápidamente  Me mira como sorprendido. Saca un pañuelo de su ropa y me lo entrega. Lo miro sin entender, me señala la nariz.
-Es la primera vez que veo una respuesta como esa...- dice pensativo- ¿Como te sientes?
-No lo se... Diferente pero no estoy muy segura en que- le respondo- ¿Cuanto tiempo estuve?
-Doce horas, a las quince habría sido el limite y te habría traído de vuelta. No comprendo el sangrado de tu nariz... Creo que sera bueno que le diga a Albert que contacte a un conocido...
Me limpio con el pañuelo y lo veo empapado en sangre.
-¿A quien? - le pregunte- ¿Es esto serio?
-A un amigo de tu hermana... no sabemos que es lo que es, no es normal para esto. Puede no tener relación,  pero no estaría mal, de cualquier forma, asegurarse de que todo esta bien...-
-Estoy un poco cansada...-
-Bien, te dejare descansar...- dice mientras se levanta y hace un gesto de despedida al salir de la habitación. De un segundo a otro, aparezco desnuda en una cama que no conozco. Frente a mi veo el rostro de Glenn, que retrocede rápidamente y toma un cuchillo. Esta desnudo y tiene un corte en cada brazo. Tengo un cuchillo ensangrentado en mis manos. ¿Que esta pasando? Suelto el cuchillo y retrocedo. Tengo miedo, se me escapan las lagrimas. Glenn guarda su cuchillo, se viste rápidamente.
-Ha estado bueno de cualquier forma- abre la puerta y se marcha. No puedo comprender, cierro los ojos.


Estoy teniendo una pésima noche. Hoy tengo deseos de hacer correr la sangre de todo aquel que se me cruce por delante, apuñalarme en el estomago y gritarle a la existencia mi ultimo aliento. Trato de mantener el control, aun hay mucho por hacer como para perderse completamente en el abismo. Una y otra vez vuelven los recuerdos azotando mi rabioso cerebro. 

..De repente, te vi ahí. Ausente como casi siempre, entre viva y muerta, entre victima y victimaria de un mundo que solo deseaba llenar de calamidades. Como siempre, en lo tuyo, como siempre volcando toda esperanza miserablemente, actuando como una botella en una fiesta sin vasos. Todo tu cuerpo no era mas que evidencia en estado puro, miles de culpables, miles de pruebas en forma de huellas digitales, fluidos y quizás que asquerosidad mas.
Una caída estrepitosa, similar a la de un meteorito llegando a la tierra. La tierra soy yo, aparentemente. De divinidad a un simple y cochino bonobo, esa ha sido tu transformación.De solo pensar en tu andar, en tus asquerosos pasos que solo pudren la tierra, en cada uno de los abruptos movimientos de tu cuerpo al chocar con otro de quizás que individuo sin importancia, se me retuerce el estomago, la garganta y los cojones. Sentí ganas de quemar cada bosque ancestral de este planeta, sentí ganas de aplastar como a hormigas a cada iluso creyente del amor, envenenar toda fuente de agua para la humanidad, contaminar y ennegrecer el mar solo con mi odio y la sangre de miles de ángeles. Ansié ver sufrimiento, ansié ver a cada uno de aquellos asquerosos bandidos que manosearon mi mas preciado símbolo, cual adolescente hablando del amor sin siquiera saber quien es su acompañante, ansié tenerlos uno a uno e invadir los rincones mas sucios de sus almas, empaparme en su mierda y escupirselas en la cara, quemar cada uno de sus sueños y hacer que cada roce que tuvieron con mi sucio bonobo se transformasen en caricias del cuchillo mas filoso de la despensa. Ansié ver el miedo en sus ojos, ansié verlos arrepentirse del nacimiento de su madre y maldecir el solo hecho de la existencia. Pero sin duda lo que mas ansié, fue ansiar ver como cada una de las huellas digitales de tu cuerpo empezaran a quemar tu alma lenta y dolorosamente convirtiéndote en nada mas que un despojo humano, carente de cariño, alegría y movimiento. Pero por mas que ansié ansiar aquello, no conseguí mas que el deseo de olvidar tu existencia, que por cierto tampoco conseguí.Tu entrepierna es patrimonio de la humanidad, tu piel no es mas que un producto que se promociona en un puto supermercado y que eternamente se entrega como muestra gratis. Tu no sabes lo que es el cariño, tu no sabes lo que es la necesidad, tu no sabes absolutamente nada salvo darme motivos para odiar cada segundo que pasamos juntos en el mismo universo...


¡Jodida puta asquerosa de Sofia! Despues de tanta palabrería uno se espera que al menos haya un poco de consecuencia. Puedo verla una vez mas, en pleno REM, con un cigarro en una mano, una botella de whisky en la otra, besando desenfrenadamente a un tipo tras otro. ¡Y para peor! La muy desgraciada que tanto abogaba por el burguesito se entrega así de sencillo a cualquier otro imbécil. Y entre todos estos imbeciles, no le basto y tenia que incluir a Glenn. Habiendo tanto hijo de puta asqueroso mas que podría haber devorado tenia que elegirlo a el. Vuelvo a sentirme como en mi adolescencia, una vez mas, Glenn, adelantándose a todo y arruinando cualquier posibilidad que se me asomaba. Vuelvo a ser el perdedor.
-Fuiste un imbécil al creer que eso resultaría.
-Guarda silencio, ni siquiera eres real hijo de puta- le respondo molesto. La gente en la calle me mira con extrañeza. 
-Tienes que dejar de perder el tiempo en esas estupideces y abocarte a lo que verdaderamente importa, la gran explosión se acerca.- me dice mi propia figura, que camina junto a mi por la calle. Se que nadie mas lo puede ver...- Supongo que no te has olvidado de la notita que pillaste en la cama. 
-En eso estoy, necesito sacarme esta porquería de la cabeza-
-Ponte la capucha- me dice apuntando a un policía en la esquina. Me la coloco. Mi largo abrigo rojo se ondea con el viento. Cruzo la calle dejando atrás al policía.
-¿No es esto pura paranoia?-
-Claro que no, la maquina ya nos tiene identificados formalmente. ¿Crees que dejaron pasar a nuestro bonito hombre muerto sin dedos?- me responde riendo a carcajadas. Entro por el edificio de mi abandonado departamento. Subo por la escalera unos cuantos pisos y cruzo el pasillo, una cortina se corre y veo la cara de un viejo vecino con el que jamas cruce palabra, finalmente llego hasta la puerta de mi departamento. Tiene una cinta puesta por la policía. Ya han estado aquí. Saco mis llaves y abro la puerta.
-¿Que se supone que encontraríamos aquí si la policía ya vino?-le pregunto
-Sigue adelante- Con la mano palpo la 9 milímetros con silenciador que me han entregado los Maníacos  Camino por el lugar. 
-No veo nada- le respondo.
-¿Y la habitación?- Camino hasta ella y sobre la cama puedo ver un extraño artefacto.
-¿Que es esto? ¿Como sabias?- le pregunto- ¿Fuiste tu el de la nota?
-Preguntas mas importantes hay ahora, revisa el artefacto.- Tomo el artefacto entre mis manos. Son muñequeras y guantes. Pero no cualquiera, son los de los dibujos del padre de Albert. ¿Es esto lo que el llamaba "guantes llamarada"?
Siento un ruido en la puerta de entrada del departamento.
-¡Policia! ¡Manos en alto!- escucho mientras se abre la puerta. Cinco policías entran al departamento. Saco la nueve milimetros. ¡Carajo! Solo tengo las balas de la pistola. Apunto al mas cercano y disparo. Veo como  cae al piso luego de un certero disparo en la cabeza. Los cuatro policías abren fuego. Me lanzo al piso para evitar las balas. Tomo angulo nuevamente y disparo, otro al piso. ¿Como carajos estoy tan preciso?
-Necesitamos refuerzos, tenemos dos oficiales caídos ¡Rápido!-
Disparo nuevamente, un policía cae luego que una bala atravesara su corazón  Continúan las ráfagas de disparos, solo quedan dos. Tengo que salir rápido de aquí  Apunto a otro, pero se pone a cubierto y mi disparo falla. Joder, no se cuantas balas quedan. Apunto nuevamente y logro darle en la cabeza a un policía mas. Apunto al ultimo policía  que aprieta su gatillo apuntándome  pero no dispara, sin balas. Aprieto el gatillo, tampoco dispara. Se me agotaron las balas. Veo el policía ponerse a cubierto y escucho como recarga su pistola. No tengo mas balas, tengo que ir sobre el, es el ultimo. Saco el cuchillo y me lanzo directamente corriendo hacia el policía  al momento en que me apunta y comienza a apretar el gatillo puedo ver que una bala sale y me da de lleno en el pecho. No, no ha ocurrido, pero lo he visto. Me lanzo rodando hacia el piso y la bala pasa sobre mi, quedo frente al policía  con una mano le lanzo la pistola al piso y con la otra le corto la garganta. La sangre me da de lleno en el rostro. Puedo sentir esa calidez tan extraña, pero tan seductora. Corro hasta la pieza, tomo los guantes y muñequeras y me los coloco. Abro el mueble de la cocina y veo dos latas de gas. Conecto a las balbulas por dentro de mi abrigo.
-Después pruebas el juguetito nuevo, hay que salir de aquí  me grita mi figura. Salgo corriendo del departamento. Puedo ver a uno de mis vecinos que me mira aterrado
-¡Policía! ¡Ayuda!- trata de correr pero lo alcanzo de inmediato. Lo tomo del cuello y lo levanto.
-Así que fuiste tu quien los llamo-
-Policía... Ayuda... Delincuente, siempre supe que algo andaba mal contigo-me responde.
-Sabes... Estoy teniendo un muy muy mal día y no estas precisamente ayudando a mejorarlo-
-Poli...-le pego con la otra mano
-Cállate estúpido .. Se te ha ocurrido elegir el bando equivocado en el peor de los momentos. Que patéticas son tus ultimas palabras- le digo mientras saco mi cuchillo y se lo clavo en el corazón.- Hijos de puta...
 Estoy ennegrecido. La sangre se confunde con facilidad con el color del abrigo. Veo la puerta abierta del puto delator, se puede ver la foto en grande del actual presidente. Estúpidos imbéciles, levantando figuras de quienes solo les entregan miseria y marginacion. Corro por las escaleras a prisa.
-Ha estado maravilloso ¿Viste el instante en que se fue?- me pregunta mi figura que mientras salta por las escaleras. Si, si lo vi... y se sintió tan bien... estoy algo preocupado.
-En el fondo sabes que lo has disfrutado, estas llegando a tu verdadera raíz retorcida y cruda. Esto es parte de lo que eres ¿Vamos a condenar al león por matar a su presa? Tenemos tanto por hacer...
Salgo del edificio y veo una patrulla de policías, un escuadrón de 7. No puedo enfrentarlos y salir victorioso, tengo que huir. Comienzo a correr por las calles mientras la policía vas tras de mi, puedo sentir como una bala perfora mi espalda. No, no ha ocurrido, pero lo he vuelto a ver. Nuevamente me lanzo al piso y escucho la bala pasar sobre mi. ¿Como es que he podido adelantarme a todo esto? ¿Que es lo que esta pasando? Se escucha una ráfaga de balas y puedo oír como va tras mio la policía  Doblo en una esquina y a lo lejos veo una barricada y mas cerca, un gran numero de personas reunidas, gritando consignas contra la corrupción  Parece que ha estallado la bomba mediática  ¿Manifestaciones espontaneas? ¿Habra visto esto venir Albert?
Son cerca de cincuenta personas, y al ver a la policía tras de mi, puedo ver como recogen piedras de la calle.
-¡Alto! Este hombr...- trata de decir un policía mientras una piedra le impacta en la cara.
-Rápido  ¡vente!- escucho que me gritan de la multitud. Al llegar hasta ellos, numerosas personas lanzan sistemáticamente piedras haciendo retroceder al pequeño escuadrón que se veía repelido ante la superioridad numérica. 
-Hay que andar con cuidado compañero, estos perros andan bravos- me dice un hombre con capucha.- ¡Atentos cabros!
A nuestra espalda, un escuadrón de aproximadamente 25 fuerzas especiales viene a paso firme. Comenzamos a recoger piedras y atacarlos tratando de hacerlos retroceder. Con sus grandes escudos continúan su paso firme. Se escuchan explosiones y podemos ver caer lacrimogenas entre nosotros. Un par son pateadas de vuelta, mientras que otras mas comienzan a llenar el ambiente de ese gas toxico. Mi respiración...
-¡A la barricada cabros!- grita un hombre de la multitud, sin el rostro cubierto. 
Retrocedemos con las fuerzas que podemos hasta la barricada. Muchos recogen piedras, mientras que otros se armaban con palos de la barricada. Veo mas gente llegar tras la barricada, un grupo de cerca de 60 personas que corean fuertemente "¡Somos mas, somos muchos mas!"
El escuadrón de fuerzas especiales arremete con fuerza, las lacrimogenas que son lanzadas hacia las barricadas son devueltas sistemáticamente. Las lumas están cada vez mas cerca.
-HAY QUE AGUANTAR CABROS, SOMOS MAS-Gritan varios, las piedras comienzan a ser lanzadas para hacer retroceder al enemigo. Varios llegan hasta la multitud y empiezan a repartir palos sin ton ni son. 
-PACO CULIAO DESCLASADO.- le grita un joven mientras recibe un golpe en la cabeza, cae al piso. La multitud luce impactada ante la brutalidad. Llegan mas policías y empiezan a patear al joven en el suelo. Mas policías se encargan de hacer retroceder a la multitud.
-¡Lo van a matar!- grita alguien, la gente se abalanza sobre las fuerzas especiales, entre patadas, piedrazos y palos fueron retrocediendo. Uno de los policías parecía enajenado con el joven en el piso y continuaba dándole patadas de forma reiterada en la cabeza. Hay mucha sangre en el piso. La policía empieza a retroceder, corro aprisa y alcanzo al hijo de puta que golpea al joven. Le doy un fuerte puñetazo en el rostro y miro al piso. El joven esta muerto. La multitud agarra al enajenado policía que pierde su arma. 
-LO MATÓ- grita uno de las personas al ver al joven. Veo la angustia y la ira en muchísimos rostros.
-¡Se acabo, este es tu jodido castigo, perro asqueroso!- le digo mientras abro el paso de gas en la muñequera. Apunto al cielo con el guante derecho y chasqueo los dedos. Una llamarada sale desde el centro de mi palma. Le indico a la gente que retroceda, estos lo hacen, sorprendidos.- Por que toda vuestra brutalidad e infamia no puede quedar impune. Debes arder, seras el primero. Todo aquello que nos domina y violenta, arderá. La maquina estallara.
Apunto directamente al perro traidor y lo incinero. Esto yo lo recuerdo. Puedo escuchar sus gritos de dolor, me acerco mucho mas a el y con el guante izquierdo, duplico la potencia de la llama. Ya no hay gritos, esta calcinado, ya casi arde por si mismo. Detengo el flujo de gas. Y salgo corriendo. La gente impactada no sabe que decir. Algunos lucen horrorizados mientras que otros celebran el incendio de quien nos ha quitado una vida. Se que muchos se sienten vengados. Me mezclo entre la multitud y finalmente salgo de esta y corro en dirección a la fabrica.

-¡GALLINAS ROSTIZADAS CEREBROS FRITOS!- Nicolas me abre la puerta saludándome  Entro rápidamente  Creo que no me han seguido. 
-¿Y esa cara?- me pregunta
-Ha sido un día muy extraño.- mira los guantes- tengo que ver a Albert.
-Debería estar en la sala de planificación -me dice. Le hago un gesto de agradecimiento y emprendo camino a través de la gigantesca fabrica. Veo numerosa gente reunida, como de costumbre. Entre los grupos puedo ver a la asquerosa de Sofia junto con Amelia. Cuando me ve, puedo ver la tristeza en sus ojos, culpa. Es repulsivo. Continuo mi camino y finalmente llego a la sala de planificación. La puerta se abre antes de que la toque, veo salir a Ayleen con un rostro de duda tremendo impregnado en su rostro. 
-¡Esteban! ¿Como estas?- me dice sonriendo
-No sabría responderte, ha sido un día agitado. ¿Que hay de ti?-
-Hay una operación... es algo nuevo para mi- me dice.- Bien, debo ir a ello
Me besa en la mejilla y se marcha. Entro a la habitación.

-Esos guantes...- me dice pensativo- yo los conozco.
-No se como, pero son los que diseño tu padre- le respondo- en el viaje final donde Zenon pude verlo a el, y a ti.
-Y muchisimas cosas mas, me imagino. Es sorprendente lo que es capaz de realizar esta planta. Arabel fue quien la encontró.  Era un herbolario, en sus tiempos se hablo en la cultura popular de el "Gran arbol". Decía la leyenda que era el ser viviente mas antiguo de la tierra, que al comer uno de sus frutos podías conectarte con la profundidad de la vida y sanar todas las enfermedades. Y resulto no ser un mito, Arabel, aventurero se lanzo tras la búsqueda de esta mítica leyenda y luego de mucho esfuerzo, consiguió dar con el. El relata que encontró un templo de una civilización antigua irreconocible, que estaba situado en pleno ártico  en una cuenca entre cordilleras, la cuenca increíblemente  en pleno ártico  tiene un clima templado... parece casi irreal. La cuestión es que en los interiores de este templo encontró una serie de pasadizos subterráneos y en la gran profundidad dio a parar con un inmenso árbol que tenia frutos luminiscentes... Pero creo que eso ya lo sabes...-
-Lo he visto-
-Ambos- me responde- ¿Como has ido con la expansión?
-¿Expansión?
-¿No has notado que tus sentidos se han intensificado? ¿No has visto como te puedes adelantar a las situaciones, sin saber como? Nuestra intuición exploto y comenzó a expandirse, casi sin que lo notemos. Ya no solo miramos, observamos, sin darnos cuenta nuestra vista se amplio y esto nos dio una mayor claridad del tejido causal en el que estamos inmersos.
-¿Entonces eso ha sido todo esto?
-No se como, pero al parecer, el rendimiento físico también se ve incrementado. De alguna manera esto nos esta potenciando. Los frutos hacen que esta explosión incremente con muchísima mas potencia, con las hojas proporciona las visiones y esta explosión, pero de forma mas lenta.

De pronto escucho como se abre la puerta, veo la inmunda cara de Glenn
-¡Tarado! Te has traído a la policía contigo.- me dice y sale corriendo en dirección al portón.
Nos levantamos y corremos hasta la puerta de la fabrica. Sofia esta ahí. Tiene un cuchillo en la mano y luce una extraña sonrisa. Yo he visto esa mirada antes, pero no en ella.
-Son 7, son de investigaciones. No han venido a desalojar- dice Nicolas.
-¿Que hacemos? - pregunta Amelia un poco asustada.
-Matarlos y punto- dice Glenn sacando su pistola.
-Dejemoslos entrar quitemosle las armas. Los encerramos y comprobamos si están totalmente perdidos o no- dice Albert
-YO QUIERO PROBAR DE NUEVO ESTA PRECIOSURA- dice Sofia mirando con un amplia sonrisa su cuchillo.
Apagamos las luces y nos ocultamos en la oscuridad. Nicolas abre la puerta y vuelve a las sombras. Los policías entran al lugar con las pistolas en mano. Cuando están todos adentro saltamos sobre ellos. Nicolas cierra la puerta. Uno de los policías trata de dar aviso por un dispositivo. Sofia se abalanza sobre el y le clava el cuchillo en la mano.
-¿PARA DONDE IBA ESA MANITO?- le dice sonriendo mientras este grita de dolor. Gustav controla a Sofia y un grupo de maníacos comienza a colocar amarras en las manos y pies de los policías, una vez puestas los toman y los llevan a una de las aun disponibles habitaciones en la fabrica.
-Sofia ¿Que ha sido eso?- le pregunta Amelia preocupada. El rostro de Sofia pasa de la sonrisa maníaca, al miedo y el agobio. Se toma la cabeza con las manos y guarda su cuchillo.
-No lo se...-le responde. La miro y no puedo entender que me pasa, conviven el mas corrosivo de los odios  y el mas grande de los deseos, en una sola figura. Tengo una constante sensación de deja vu.
-¿Que carajo has hecho? ¿No ves que has puesto en riesgo todo?- me grita Glenn
-Creí que no me habían seguido.-le respondí
-Pues creíste mal- me responde. Mira a Albert- Ya lo tienen identificado, si sigue estando acá acabaran teniendo las excusas suficientes para entrar.
-¿Quieres echarlo?- pregunto Nicolas extrañado.
-No tengo idea, solo creo que si sigue aquí todo se ira a la mierda. Estas en las noticias Esteban, los seis muertos en tu apartamento y el vídeo de como incineraste al policía frente a toda la gente.- estoy jodido.
-En las redes sociales esta el vídeo, tu rostro no se ve por la capucha- me dijo una muchacha con un notebook en sus manos.
-A mi pesar, tengo que estar de acuerdo con Glenn con que esto si puede presentar un peligro para la fabrica...- dice Albert- Hay mucho por hacer como para que nos encuentren, a todos, partiendo por ti. Tengo unos contactos por los suburbios. Pueden darte un lugar donde puedas estar a salvo de la policía, quizás, algunos hasta acabarían defendiéndote en casos últimos. Nos comunicaremos en ciertos puntos específicos, para las asambleas tu compañera se encargara de llevar tu postura.
-¿Que? ¿Tengo que irme? ¿Mi compañera?- le pregunto a Albert.
-Sofia se encargara de mantenerte en contacto con la acción de los Maníacos- me respondió
-¡Joder!¿Por que ella?
-Por que me lo ha pedido... esto ya lo habia visto venir, lo de la noche en que partiste donde Zenon no fue pasado por alto por la maquina.-
-La puta madre ¿No puede ser alguien mas?
-Sabes que estamos con numerosas operaciones, Sofia es la indicada- me responde.
Rabia, maldigo esta vida que se tuerce mas y mas a cada segundo.



Estoy cansado. Una vez mas Sofia me ha dejado esperando sin siquiera avisar. Ya casi no duerme en la casa, me agobia pensar que quizás este pasándose al otro bando. De cualquier forma, un hombre tiene necesidades, el streapclub servirá de algo. Entre las numerosas bellezas, puedo apreciar una muchacha, apenas con dieciocho años aparentemente, de pelo negro, tiene una extraña mirada.
-Quiero esa- le señalo a un tipo junto a mi. Este la llama y ella viene de inmediato.
-Mírate querida, estas preciosa. ¿Eres nueva?
-Preciosa y nueva.- me responde.
-Acompáñame.- la mujer se me acerca y sienta sobre mi. - No te imaginas querida... estoy apunto de colocar a mi hermano de ministro del interior. En este momento, estas en el regazo del hombre mas poderoso del país.
Continua su baile y me mira, como dispuesta a escuchar.
-Ni te imaginas las cosas que están pasando, en estos instantes el terrorismo prepara sus armas para destruir la democracia, mi democracia... Ahora, podre finalmente salvar el orden, y hacer justicia por mi padre. Insisto en que fue un asesinato... Ademas Sofia, me deja solo en un momento como este, me siento tan decepcionado...
-Estoy yo aquí para levantar ese animo- dice acercándose aun mas y continuando con su baile.



-¿Ha ido todo bien?- pregunta Albert a través de este repulsivo aparato
-Me han tratado bien aquí, aun tengo muchas preguntas-
-Tomate el tiempo que necesites, recuerda que si no superas esto, puede ser que vuelvas a olvidarlo todo. Estoy lejos, pero sabes que si necesitas de mi ayuda, apareceré-
-Estuve recordando unas ultimas sesiones con mi psiquiatra. Me decía que por algún especie de trauma repelía toda esta basura de argh... Tengo problemas para expresar mi agradecimiento y en este momento es tremendo. Puaj, debo tratar de expresar un poco mas estas cosas humanas desagradables que ocurren. Akh.. Te estimo. ¡Ya esta! MIRA QUE GLORIOSA QUE SOY.-
-Es mutuo.- ¡Que asco que me doy! Esta sonrisita tan humana.
-Tengo que..  argh, algo. Hasta pronto-le digo y corto el teléfono apresuradamente. 

Camino por las calles del gran Pueblo, el ultimo del país al norte. Tengo la sensación de haber estado aquí antes. Al pasar junto a un teatro siento un chispazo.

-Laura, este es Fernando Aristegui- me dice sonriendole a un hombre de cabello negro y gesto soberbio. 
-¡El famoso artista!- le respondo
-¿Y quien eres tu, hermosa?- dice acercándose y poniéndome su mano en mi mejilla. Lo miro extrañada. Veo rabia en el rostro de Karol*)si decidí así sin mas cambiarle el nombre de Karen a Karol, en la edición completa se corregirá(
-Se podría decir que una artista y una pensadora, tengo muchas ideas.
-Karol me hablo de ti, y si, ahora que te veo estoy bastante interesado- me dice jugando con mi pelo- voy a hacer que toques el cielo, confía en mi...



Estoy en mi habitación en los suburbios. ¿Cuantos días han pasado? ¿Como es que el tiempo se ha escapado de manera tan rápida?  Suena la puerta. Miro por el pequeño ojo de esta y veo a una Sofia con los ojos abiertos como platos.
-¿Como estas, querido?- me dice al abrir la puerta, me mira de una forma asquerosamente provocativa.-
-Y tienes el descaro de decirme querido. Dame la información mejor sera- le respondo cortante, se me acerca y me besa en la mitad de mi boca. Retrocedo y la miro sin comprender.
-¿A que estas jugando?-
-¿A que juegas tu con todo este teatrillo? Tienes las pupilas dilatadas y tu pulso agitado, se saborea la mitad de tu puta boca- me responde riéndose  Da un beso y me lo sopla.- No perdamos el tiempo querido, el abismo se nos puede venir encima.
-No puedo entenderte Sofia, no comprendo este cambio...-
-Ya entenderás, niño mio, ahora nos llama la acción con los Maníacos-
-¿Que pasa?
-¿No te has dado cuenta que mañana es el día de la marcha? Diversas organizaciones estudiantiles y sindicatos han adherido y llamado a paro nacional. Es el día de la operación masiva. Te traigo este bolsito tan lindo con todos los implementos necesarios. Se ha acordado para no dañar el proceso con la exabrupta respuesta del régimen,  no asesinar a ningún policía el día de mañana, pero si, aportar y reducirlos sistemáticamente, liberar a todos los detenidos... La idea es que en esta manifestación  la gente triunfe y la policía no pueda responder.  Este primer estallido tiene que ser victorioso para acelerar el proceso inminente. Mañana te pasare a buscar, tienes que estar listo, iremos juntos y haremos equipo con Gustav y Nicolas. En el campo de batalla nos encontraremos con el resto.-
Se me acerca nuevamente y acaricia mi cabello.
-Niño mio, se nos viene encima la prueba de nuestras alas- me besa en la boca y siento una vez mas el proceso maldito de las galaxias estallando. - Hasta entonces extrañame, tengo cosas que hacer. Nos veremos querido.
La puerta se cierra.



Puedo verme en un pasillo. A mi espalda esta la habitación de Esteban. No tengo el bolso. ¿Habré ya hablado con el y no puedo recordarlo? Tengo deseos de volver, pero no me atrevo. Se que esta molesto por lo de REM aquella noche. La verdad es que ni siquiera se bien que paso. Me esta pasando bastante seguido que pierdo trozos de mi vida, lo de la mano del policía todavía me sorprende. ¿Que esta pasando conmigo?  
Estas semanas he evitado lo mas que he podido a Hernando, estoy agobiada de mentir y fingir. La verdad, siento que estoy perdiendo el control y eso pone en riesgo no solo mi identidad, sino también mis lazos.
Mañana es el paro nacional, la primera gran operación masiva. ¿Podremos potenciar y ayudar a dar victoria a estas semillas de sublevación y caos que están brotando?