Tortura mental Op.3

Me di una ducha, al terminar me miré al espejo, me noté algo pálido, no me sentía muy bien pero no podía posponer nada, volví a mi cuarto, observé con curiosidad aquel atuendo, aun somnoliento me detuve a pensar... esto no podía estar pasando, ¿Cómo se iba a materializar un sueño?, por muy vivido que fuera, materializar un sueño parecía imposible. Tenía que parecer todo un caballero ante los ejecutivos, si presentaba aquel proyecto sin ir bien vestido seguro me juzgarían los muy hijos de puta... sentí que ese traje me venía como anillo al dedo... además de poder usar aquel bastón para apuntar. ¿El traje que vestía la peor de mis pesadillas? ,¿el hombre que encarnaba todos mis temores, mis traumas, todo lo que dejé atrás?... fue inevitable. En 5 minutos vestía elegantemente, me había hecho un traje con to lo que dejé atrás por así decirlo. Salí de mi casa, y ni llegando a la puta esquina apareció un perro enano y chillón, de estos que suelen tener las señoras adineradas, me ladraba y parecía que en cualquier momento se me arrojaba. Seguí el paso y 2 perros se unieron, estos ya eran otro cuento, kiltros de contundente tamaño, comenzaron a seguirme, hasta que uno me atacó, usé el bastón como defensa, uno de los perros lo mordió, los otros perros se de tuvieron de inmediato y lo miraron, el perro que mordía el bastón cayó al suelo y comenzó a convulsionar, busqué ayuda para el pobre animal pero al acercarme  los otros dos perros se mostraron agresivos, aunque temerosos al acercarme yo a ellos. En un colapso solo corrí, tomé el autobús, mas de alguien me dirigió una mirada, pero eso lo relaciono con la vestimenta, nunca ves sombreros de copa en el transporte, tampoco un bastón en alguien tan joven, y menos portándolo como complemento y no como ayuda. No dejaba de pensar en aquel perro, en lo que había acontecido, en el oscuro y extraño sueño. Llego al edificio, tomo el ascensor, llego al despacho de estos putos ejecutivos, ya no parece que la prosperidad merezca la pena, ya no me interesa su puto dinero, siento que con el tiempo fui superando barreras, temores, miedos, pero de alguna forma u otra también fui omitiendo lo que era realmente la vida, o al menos así lo veo, pues mostrar proyectos a ejecutivos de mierda no parece tan hermoso como mostrar un cuchillo a los mismos. Entré y elegantemente me dispuse a comenzar la charla.

- Buenos días caballeros, sus caras largas son una hermosa motivación para presentar algo que tal vez les guste, y si no les gusta allá ustedes.- Tomé la pizarra y colgué un esquema.- Lo que acá pueden observar es el proyecto más ambicioso jamás hecho en nuestra ciudad, pretende cambiar a la gente, para un bien, y aportar a sus poderosos bolsillos para que al menos le pongan algo de atención en vez de pasar de el como hacen con lo que no les conviene. Consiste en añadir a algun lugar ya conocido, una sala de Cine local, con películas locales, nacionales, para fomentar el cine de los que nos rodean, para conocer un poco mas aquellos mundos internos. Funcionaría como cualquier cine por lo que, la gente cambiaría su cultura respecto al arte que está cerca de ellos, pero a su vez no dejaría de ser un negocio para ustedes. 

-¡Pésimo!- Gritó uno de ellos. Sabemos que el cine extranjero es el que más publico atrae, y por lo tanto si vas a hablarnos de cines que generen dinero, no nos pongas algo tan malo como eso.

-¡Mal planteado!- Otro grito - Si te fijas el arte local no prospera, y yo pienso que es porque es muy malo...

-¿Alguna vez vio alguna película local?

-No, porque no son conocidas.

-Porque la gente no las ve.

-Porque son malísimas

-Como puedes decir eso si jamás viste una maldito ejecutivo hijo de puta. 

Se pusieron de pie todos los ejecutivos y todos gritaban cosas, que yo no tenía futuro, que era un idiota, que hablarían de mi a los otros y que mi proyecto jamás prosperaría. 

Me sentí tentado, di un bastonazo a uno de ellos, pero en esta ocasión no comenzó a convulsionar, se quejó del golpe, sacó su celular y llamó. Pensé que se me venía la guardia encima.

-¡Viejo hijo de puta!, sabías que quería estudiar danza y tu me obligaste a esta puta ingeniería, te detesto con toda mi alma, te mataría ahora mismo su pudiera hacerlo, llevo 20 años sufriendo miserias por tu maldita culpa, teniendo que ser un puto chupasangres.

Se quitó la chaqueta, la corbata y los zapatos, y se fue dando saltos hasta la puerta, allí calló y comenzó a calar hondo el polvo que había en el suelo, gritando escenarios de su adolescencia y su adultez, tenia esposa e hijos, pero el en realidad quería un esposo, tenía tanto miedo de la sociedad, de su padre ex militar y ya estaba harto de que le jodieran en la escuela cuando decía que le gustaba la puta danza. Lloró desconsoladamente y atónitos miraron los ejecutivos alrededor de el. Comencé  a bastonearlos a todos, me encontré un montón de artistas, trotamundos, aventureros, deportistas... todos frustrados. Y luego las quejas sobre sus traumas, era todo lo que habian dejado atrás... era como si vivieran mi sueño pero en la realidad, luego inevitablemente uno corró hacia la ventana y se azotó contra ella, no logró romperla, entonces todos tomaron  la mesa de conferencias y la usaron como ariete y uno a uno cayeron doce pisos. Mis ojos como platos abiertos se desviaron y me desmayé. 

Camisa negra, cara de calavera... guadaña...

-¡Bienvenido de vuelta muchacho!, ¡jaaajaja!. 

-¿Que mierda?.- Lo observé, era el otra vez.

- Te lo dije, soy el peor de los demonios, la misma gente me fabrica, y vivo dentro de ellos. A veces soy tan grande que si me dejaran manifestarme directamente solo colapsarían y saltarían, ya sabes como hizo el curita ese de la película cuando se le metio el diablo por salvar a una niña, pero no porque yo sea un demonio, si no por sus propios tormentos. 

- ¿Y por que mierda dejaste aquel atuendo en mi casa?

- Pero si lo fabricaste tu mismo la noche antes de la exposición.

- ¿De que hablas?, tenía un sueño tan horrible como este.

- Pero tu mundo físico no es igual a tu mundo mental.

-¿Significa que estoy haciendo algo mientras sueño esta mierda?.

- Nah, te tienen atado.

- Da igual, esto no puede ser real.

- Mataste al pobre perro con los recuerdos del dueño que lo pateo y abandonó después de una vida de felicidad.

- Lo toqué, no sabía lo que sucedería, ¿y la puta carta del escritorio?.

- Eso si fue un recuerdo mío, muahahaha.

- ... 

Miré a mi alrededor, íbamos en un furgón, en esta ocasión manejaba alguien más. 

-¿Y este quien carajo es?.

- Eres tu, huyendo de tus recuerdos.

De pronto aceleró, abrió la puerta, saltó y se golpeó contra un árbol, el furgon se descontroló pero ya no había camino, no había nada donde caer. Entonces vi a lo lejos una silueta, vestía de poli.

Desperté en una cama de hospital, con un puto policía a los pies. Me leyó mis derechos y me informó de que una vez me dieran el alta iría a parar a prisión preventiva, sería juzgado y probablemente me pudriría en la cárcel. 

Pedí permiso para ir al baño, pensando en saltar por su ventana y quitarme la vida. Una ventana muy chica, corrí la cortina de la ducha y en ella colgaba un traje harapiento, era un terno hecho de trozos de poleras, pantalones, telas, sábanas tal vez. Pero todo negro, decidí dejarlo ahí, iba saliendo del baño y encontré una notita pegada en la puerta. "Necesitas aprender mucho mas de aquel bastón, ya habrá tiempo para contarte más, muajajaja". Salí del baño y había mas gente cerca de mi cama, el policía me escoltó y me dijo que al día siguiente iba a los putos tribunales. 

Jok~