Bienvenida Sangrienta Malvenida

Bienvenida Sangrienta Malvenida: Tercer Movimiento: Sexta Parte: Batallas

Por: Prometeo


Camino entre la multitud junto con Sofia, la gente grita consignas contra la corrupción y la miseria propagada por la maquina. Numerosas bandera se levantan y ondean entre el tumulto, acompañados por numerosos carteles y grandes lienzos de las diversas organizaciones. Están presente organizaciones sindicales del sector publico y privado, inmensas columnas de estudiantes secundarios y universitarios, incluso, pequeños niños que acompañan a sus padres. Se puede ver una pareja de ancianos tomados de la mano. La mujer lleva un cartel que versa "Por que nunca es tarde para cambiar el mundo"
-¿Cuanta gente ha llegado?- le pregunto a Sofia mirando la inmensa multitud.
-Con facilidad cincuenta mil personas, podrían ser mas- me responde. Es muchísima gente. A lo lejos puedo ver una batucada y numerosa gente disfrazada haciendo bailes y coreando consignas por la educación y la salud. Incluso el arte se hace presente en la protesta social.
-¿Donde están Gustav y Nicolas?-
-Vienen con un grupo de gente. Gustav es el vocero de la asociación de pacientes de la salud mental. Se ha contactado a la mayoría de la gente de los motines. Incluso, en el diario El Gato Negro, se publico el escrito fundacional  de la asociación. Ha sido tema de debate, aunque no en los medios del régimen, obviamente. Varios psiquiatras y psicólogos se han presentado ofreciendo asesoramiento y ayuda, varia gente también ha contactado pidiendo orientación y soporte. Es una nueva fuerza presente en el tablero.- Sofia apunta hacia un grupo que viene marchando por la arteria principal de la gran ciudad- Ahí están.
Nos acercamos hasta el grupo, veo numerosas caras, reconozco unas cuantas que están siempre en la fabrica, otra gran cantidad luce desconocida para mi. Gustav conversa con el tipo que vi discutiendo con Valerio. El psiquiatra de Laura. Nicolas camina un poco mas atrás riéndose con varia gente, al vernos les dice algo y se nos acerca.
-ESTO SE VIENE TAN BONITO- luce bastante ansioso
-Es malditamente sorprendente, es muchísima gente y sigue llegando mas- le respondo.
-Me parece que esto marcha mejor de lo que esperábamos- dice Sofia
-Los titiriteros de la maquina deben estar con el maldito trasero en las manos-
Se puede ver un gran contingente de policía, varios enfilados protegiendo farmacias, bancos, locales de grandes empresas y edificios de los diversos ministerios. Al pasar junto a ellos, frente a el banco que lleva el nombre del país (que curiosamente es privado) la multitud levanta consignas contra el abuso de estos. Nicolas se acerca hasta ellos y empieza a ladrarle a los policías, varios miran con desprecio, mientras que otro se ríe, seguramente al verlo salir precisamente de esta columna. "No estamos locos. Locura es saberse oprimido y abusado y no rebelarse." Versa un gran lienzo con el logo de la asociación.
Numerosas columnas se encuentran con la columna principal, miles y miles de personas siguen llegando. Es impresionante, miro hacia atrás y no puedo distinguir la cola de la marcha, hacia adelante tampoco se puede distinguir la cabeza de esta. Por ambas intersecciones en la calle van llegando cada vez mas y mas columnas. Puede distinguirse a lo lejos un fuerte contingente de fuerzas especiales, preparados, junto con sus carros lanza-agua y zorrillos. Micros inmensas preparadas para encerrar a cuantos puedan por decirle que no al saqueo, a la miseria y la opresión. Por un par de migajas y poder, han olvidado a que lado del tablero pertenecen. Luego del proceso de lavado cerebral de las instituciones especializadas en la coacción, esta gente se convierte en perros amaestrados de las leyes de la maquina, el Estado al que sirven no es mas que una gigantesca bestia domada por los máximos poderes económicos. Son dueños del capital y de la fuerza, se tratan de lavar las manos con ridículas elecciones que, dada la estructura del sistema, solo se convierte en elegir a quien pasarle la correa que llevamos al cuello. Nos hicieron creer que era natural delegar el poder, incluso el mismo pensar. Una dictadura en forma de televisores y tarjetas de crédito. La miseria no debe guardar silencio, y hoy, aquí, cientos de miles gritan al unisono un coro que vaticina la inevitable caída de la maquina. Somos todos gasolina, a la espera de una chispa para incendiarlo todo. Largas noches de insomnio se vendrán para los señores Angelini, Matte, Paulmann, Luksic y como no los jodidos Echeñique. Retuercete Hernando, el imperio que te ha dejado tu padre se derrumbara.

Se escuchan diversos megáfonos, se realizan mitines en diversos lugares. Poco a poco la gente empieza a corear "Se va acabar, terminara, la dictadura comercial" El canto comienza a esparcirse en la inmensa multitud y cada vez mas voces la corean. Luego de largas repeticiones el sonido del coro era estruendoso, miles y miles de voces se volvían una sola. De pronto, se escucha un estallido y entre la multitud caen numerosas bombas lacrimogenas. La gente empieza a correr, otros intentar lanzar las lacrimogenas de vuelta con los perros de la represión. Veo a lo lejos un amplio contingente de policía montada.
-¡¿Que carajos?! Se supone que aun teníamos tiempo- dice una mujer a mi espalda.
-NO SE AGUANTARON ESTOS ASQUEROSOS CERDOS, ESTÁN ANSIOSOS- dice Sofia con los ojos abiertos inmensamente- Pues, yo tambien.
-Es tiempo- me dice Nicolas y le hace una seña a Gustav
-VAMOS- dice Gustav
Un grupo de 15 personas nos acompaña en dirección hacia el campo de batalla. Cuando estamos mas cerca podemos ver numerosos policías repartiendo palos y agarrando a numerosa gente.
-¡Ya saben! ¡Ocupen los dardos y jeringuillas, sin matar a ninguno!- Les dice Gustav. Corremos en dirección hacia ellos.
Apunto con mi muñeca a un policía próximo y disparo uno de los dardos con risperidona. Bonito juguete el que me trajo Sofia. El dardo da en el cuello del policía y este se desploma casi de forma instantánea. Jodidamente efectivo. Sofia pasa corriendo junto a mi y se abalanza sobre un policía que cae al piso, le patea el estomago y le quita las armas.
-¿No te gustaba jugar? Yo también puedo- le dice sonriendo. Le inyecta con una jeringa en el cuello un tranquilizante de animal.
El grupo va avanzando y arrasando con los contingentes de policía, de pronto escucho un estallido y siento el golpe de una lacrimogena directamente en la cara. No, no ha pasado pero lo he visto, cuando voy a lanzarme al piso siento un empujón y me caigo.
-Lo vi venir- le dije
-Yo también querido, te veías bonito con el rostro destrozado, pero aun hay cosas que hacer- dijo Sofia riéndose.
Todos los policías cercanos están reducidos, procedemos a quitarle los uniformes y poner amarras en muñecas y tobillos. Varia gente se acerca hasta el lugar, muchos ya están con capucha. Comienzan a armar una barricada. Me acerco hasta ella y con los guantes la prendo. Escucho un par de aplausos. Algunos me miran nerviosos, es posible que me hayan reconocido, solo a mi se me ocurre venir con la misma ropa que el día del vídeo. Reflexiones Bizantinas estas, tenemos mucho por hacer. Corro hasta Gustav y el grupo de maníacos reunidos.
-Vamos a ir con los uniformes a soltar a los que han logrado atrapar. Nos dividimos, la mitad va uniformado la otra, persiguiéndonos. En el caos del enfrentamiento los liberamos para luego desarticularlos completos.-
Mientras Gustav y otros maníacos se visten, los otros comienzan a saltar cerca de las barricadas y la gente, gritando "VAMOS A SOLTAR A LOS QUE ATRAPARON" El grito se empieza a expandir mas allá de las voces de los maníacos. Gustav da la señal.
-VAMOS VAMOS, SI SE PUEDE- grita Nicolas y comenzamos a avanzar hacia la gran micro de la policía.
Gustav y otro maníaco disfrazado me llevan detenido corriendo en dirección a la policía . Que bonito plan. Numerosa gente corre tras nosotros. No solo maníacos, es una gran cantidad de gente. Varios policías se nos acercan y al ver el grupo entran en alarma. El carro lanza-aguas apunta, el zorrillo esta listo para partir. Gustav logra llegar junto conmigo a la micro de detenidos, un policía abre la puerta. Le clavo una jeringuilla que tenia preparada bajo la manga, este se desvanece y cae el piso.
-Vamos gente, todos afuera- les grito. Varios empiezan a salir a prisa. Uno me mira
-Yo te conozco, te he visto-
-No mas de eso por favor.- le respondo mientras veo que no quede nadie mas adentro.
-Ya gente, vamos a atacarlos por atrás.- dice Gustav entregando varias jeringuillas a la gente. - con eso quedaran dormidos.
Algunos lucen reacios, otros inseguros, aunque, también hay quienes se muestran decididos. Avanzamos y nos vamos directamente por la espalda a los policías que enfrentan a nuestros compañeros. Uno a uno van cayendo.

El zorrillo pasa velozmente llenando todo de humo. Le lanzan numerosas piedras, una de estas da en uno de los ductos y el gas se estanca. El zorrillo se detiene y sus puertas se abren, tres policías salen de un vehículo lleno de su propio humo y tratan de huir. La gente se abalanza contra el vehículo y comienza a moverlo hasta finalmente, conseguir volcarlo. El conductor escapo como pudo. Desde la otra esquina se ve venir un contingente de policía montada. El carro lanza aguas hace retroceder a la gente, algunos lanzan molotov contra ellas. Cuando se estrellan estas maravillosas botellitas en el bicharraco mecánico de la represión, el fuego se deja ver sin tapujos.  Un par de maníacos saca de sus abrigos unos martillos y varios trozos largos de metal. Los clavan en la calle. Son como los miguelitos, pero no se pueden barrer.

El guanaco pasa veloz y se escucha un fuerte estruendo. Se le han reventado las ruedas. La gente se va sobre el vehículo. Numerosos policías salen de el dando palos y buscando camino para escapar, un par lo logra, los otros cayeron por las jeringuillas. Uno de los maníacos se sube al vehículo. La caballería arremete y un chorro desestabiliza a varios caballos que caen al piso con su jinetes. Los maníacos preparan los dardos y apuntan a la policía, algunos caen del caballo, otros se duermen sobre este.  El chorro de agua dispersa a la policia y estos se ven forzados a retroceder. Se escucha un estruendo. Puedo ver como un numeroso grupo de gente entra al edificio del banco, que luce sus puertas completamente destruidas. Varios salen con mesas y muebles con los que arman una inmensa barricada. Entre la multitud puedo ver a Glenn.
Veo llegar a Ayleen y saludarnos.
-La policía ha retrocedido en todos los puntos de conflicto, acabo de hablar con algunos de los Maníacos-
Cada vez llega mas gente y corean canciones de protesta en la gigantesca barricada- hasta ahora, lo estamos logrando.

Glenn sale del banco con un par de bolsas, lanza una cerca de la barricada y saca un puñado de la otra y el resto lo lanza al aire. Varios billetes caen al fuego de la barricada.
Cuando le voy a hacer una señal a Sofia para que nos acercáramos a la barricada, veo que su nariz sangra.
-¿Estas bien?- me acerco y saco un pañuelo. Me mira confundida y desorientada, lo toma y se limpia la sangre.
-Me duele mucho la cabeza...- dice mientras se sienta en el piso. Miro a Ayleen.
-La llevare a la fabrica, con todo esto dudo que estén los ojos puestos ahí en este instante- le digo mientras veo como Sofia se toma la cabeza y tambalea.
-Supongo que si, esto va a durar un buen rato mas- me responde.
-¡Se lo van a perder! Esto estará magnifico- dice Nicolas dando saltos alrededor nuestro



Entre la multitud, veo marcharse a Esteban y Sofia. Me acerco a la barricada, Glenn me mira con desprecio. Oportunista asqueroso, yo conozco a los de su calaña. Puedo ver en sus ojos el deseo de dominación, su concordancia con los Maníacos es meramente circunstancial. Si, es malditamente inteligente y se muestra como un maestro en la estrategia, pero esta lejos de la figura de Albert. Nuestra búsqueda es la liberación, la de el, es el poder. Puedo olerlo, es ese pequeño germen dentro de toda gran causa, que tiende a la degradación, como una pequeño enfermedad, que de propagarse lo suficiente, puede causar un vuelco en todo. Me diréis paranoico, pero os lo aseguro, cuando ocurra, sabrán que lo vi venir.

Los Maníacos han sido el vuelco que necesitaba en mi vida. Aparecieron justo cuando todo se había desmoronado, me salvaron de la nada...  Aun recuerdo esa noche enfurecido destruyendo los escaparates uno tras otro. Estaba harto, ya no podia seguir conteniendo tanta rabia y frustracion. Imaginaba en cada escaparate la figura de quienes han hecho mi vida y la de mis hermanos, miserable. Siempre fui activo politicamente, aunque eternamente reacio a los cargos. Yo era de los que se paraba sobre un banco y llamaba a asamblea. Algunas veces se reunia gran cantidad de gente, otras veces solo conseguía miradas de reproche (Asquerosos colegios privados). Me marche de casa muy joven, a los 18 entre a militar a un grupo trotskista y entre la militancia y la amistad me acabe yendo a vivir con varios de mis compañeros de aquellos tiempos. Siempre fui un enamorado de la historia. Lo que mas me enaltecía eran las grandes rebeliones y revoluciones. La revolución rusa siempre fue constante en mis estudios. A pesar de ser trostkista, no podía evitar sentir asco ante el trato del ejercito rojo con los anarquistas El ejercito negro compuesto en su mayoría por milicianos, consiguió dar grandes derrotas a las fuerzas zaristas. En la guerra demostraban ir por la revolución, pelearon codo a codo contras las fuerzas del antiguo régimen que venían a reclamar de vuelta sus privilegios. Despreciable es que luego de que cayera el ejercito blanco, se tratase a los anarquistas como enemigos y se les haya masacrado. Algo tan bello se desfiguro tan rápido... luego la enfermedad del Stalinismo se esparció y acabo deformándolo completamente.

-Maniacos, hay cosas por hacer- les digo a varios. Cada vez llega mas gente, puedo ver que incluso, las batucadas han permanecido. Aun somos miles y miles, la represión fallo en su primer intento y no consiguió siquiera la dispersión.


Glenn, con un uniforme de policía me da la señal. Doy un par de pasos y doy la señal, un largo bostezo. Nicolas sonríe.
Me acerco hasta la ventanilla y al policía en su interior le hago una señal, baja el vidrio.
-Esta perdiendo aceite el vehículo- le digo y apunto al piso. El policía no puede ver, le avisa a su compañero y este se baja por la otra puerta. Apenas baja, Nicolas lo intercepta con una jeringuilla, lo deja caer al piso y entra a toda prisa al guanaco. Le da un puñetazo al policía y con la otra mano abre la puerta frente a mi. Me acerco al policía y ocupo mi jeringuilla. Lo bajo del carro y me subo, Glenn se acerca y se sube.

Tomo el asiento del conductor y Glenn el de copiloto, Nicolas se va directamente a la torreta de agua.
-¿Como funciona esta cosa?- dice maravillado
El vehículo tiene las llaves puestas. ¡Partimos!
Cuando el vehículo se mueve numerosos policías se acercan sin comprender, al ver a los dos policías tirados en el piso, se alarman. Un chorro del guanaco sale disparado, dándole a una patrulla.
-¡Apunta bien! - le reclama Glenn. Nicolas mueve la torreta como puede. Un chorro sale directamente contra los policías, tirando al piso a algunos.
-¡Ahora si!- grita Nicolas emocionado. Subo la velocidad, varias patrullas van tras nosotros. Nicolas les dispara agua en el parabriza para obstruirles la visión. Puedo ver varia gente, algunos lanzan piedras contra nosotros, muchos lucen perplejos al ver que el chorro de agua no va contra ellos, sino que contra la policía. Muchos gritan enaltecidos. Al llegar junto a la gente viro en U y quedamos frente a las patrullas, y la gente a nuestra espalda. Varios avanzan junto al guanaco y recogen piedras. Nicolas espera para disparar el agua. Un policía con megáfono se baja
-Reg...- no alcanza a decir su primera palabra y Nicolas le dispara en plena cara.
-PUTAMENTE PRECISO- dice celebrando.

La gente empieza a lanzar las piedras contra los vehículos policiales, avanzamos lentamente con el guanaco, disparando agua contra las patrullas. El zorrillo viene a lo lejos. Acelero.
-Abróchense los cinturones señores.- les advierto. Piso a fondo el acelerador y voy a toda velocidad en direccion al zorrillo, pasando mas alla de las patrullas. Trata de evadirme pero lo sigo, mi pie a fondo no se ha despegado del acelerador. Impactamos al vehículo y este sale despedido y se estrella contra una tienda.
-¿Todos bien?- les pregunto. Nicolas adolorido tirado en el piso levanta su mano con un pulgar en alto. Coloco el vehículo bloqueando la calle a modo barricada, los policías están atrapados con la gente. Varios Maníacos han actuado y han dormido a varios. Se escucha un disparo y se puede ver sangre en el brazo de un hombre.  Los perros de la maquina son reducidos, varios maníacos se suben a las patrullas policiales.
-Oye, se nos olvido poner la banderita- me dice Nicolas entregándome esta. Por la venta la cuelgo, es completamente negra. De las patrullas se levantan mas y mas banderas negras. Acomodo el vehículo y partimos en dirección a uno de los grandes supermercados cercanos. Nos bajamos y destruimos las puertas. Dentro del lugar tomamos toda la comida disponible en unos sacos. Una vez conseguimos vaciar los pasillos de comida volvemos a los vehículos (no sin antes destruir asquerosos televisores). Nos dividimos, un par volvería con la gente, nosotros emprendemos rumbo a uno de los suburbios, donde vive Esteban. Es ahí donde la miseria se presenta cruda. Al llegar a una de las poblaciones vemos numerosa gente acercarse a los vehículos. Ya nos quitamos los uniformes de policía, nos bajamos y saludamos. Sacamos la comida y la dejamos toda apilada sobre los vehículos. Una mujer con un niño en sus brazos agradece a Nicolas al ver una gran cantidad de pañales.
-De verdad que nos hacia falta, es super difícil la cosa- le dice
-Es por que nos la han hecho difícil, esta llegando el tiempo en que les pongamos frenos- le contesta. El sol se empieza a ocultar.



-En este momento, desde la sede del palacio de gobierno, el nuevo ministro del interior Rodrigo Echeñique en cadena nacional habla sobre los hechos del día de hoy, en el paro nacional.

-Me parece que lo que ha acontecido el día de hoy ha sido completamente lamentable y dañino para el país. El daño a la propiedad publica y privada ha sido inmenso, los hechos de violencia que hemos presenciado, nos duelen a todos los habitantes del país. Es comprensible que exista frustración por los problemas de la crisis, pero este es el escenario económico actual, y aunque nos duela, tenemos que apretarnos el cinturón. Estoy seguro de que la inmensa mayoría silenciosa, que no marcha, que trabaja y se esfuerza por hacer día a día este país mas grande, hoy, se siente completamente pasada a llevar... He hablado con el presidente y estas medidas serán implementadas para resguardar el orden y atrapar a quienes quieran por la violencia exigir cambios. Se creara una comisión investigadora de los sucesos del día de hoy, dadas las sospechas de inclusive, crimen organizado. Celebramos a quienes se manifiestan legítimamente de forma pacifica, repudiamos a quienes creen que la vía es la violencia. Las fuerzas policiales dispondrán de mayores ingresos y facilidades para detener a quienes realicen estos actos. Estoy...
-¡Ochocientas mil personas solo en esta ciudad, no es poco para nada!  La inmensa mayoría del país se moviliza y ustedes quieren seguir robando. Esto pasa por tratar de salvar a la banca privada, sois unos descarados.- le grita uno de los periodistas
-¿Que hace usted aca?-le pregunta alguien
-Vengo como periodista de El Gato Negro- les contesta. Los policías se van sobre el.
-Usted no tiene autorización para estar acá.- le dice el ministro. El sujeto se va gritando y riendo escoltado por la policía. El ministro mira a la prensa y se marcha rápidamente, eludiendo las preguntas.




-Vamos- le digo a uno de los maníacos que me acompaña. Puedo ver a Claudia a punto de salir al aire junto con Enrique Salazar, perro de los burgueses. Todo esta urdido, solo esperamos a que empiece el espectáculo. Suena una música y parten los titulares.




-Cerca de cuatro millones de personas acudieron al llamado a paro nacional y movilización, solo en la capital se registran ochocientas mil personas. La policía, que ha actuado con brutalidad fue repelida con efectividad por los manifestantes. Las manifestaciones se han extendido durante prácticamente todo el día, aun, en algunos sectores, se registran barricadas y cacerolazos.- Estoy leyendo el teleprompter, esto no es de mi cosecha. ¿Que pasa? ¿Como es que no me están tratando de obligar a mentir?
-Gobierno repudia los hechos del día de hoy  y anuncia nuevas medidas de represión...- Enrique frunce el ceño al leer el teleprompter.
-La maquina empieza a tambalear, la gente se despertó y ya no podrán hacer nada para parar lo que viene- ¿Que pasa con el teleprompter? Puedo ver parado un hombre con mascara, como los informantes, junto al productor. Este muestra una mueca de espanto en su rostro.
-Ahora, es momento de barrer con la miseria que nos han entregad... ¡BASTA! NO PUEDO SEGUIR CON ESTO- se levanta del asiento.
El tipo con mascara entra a la escena y le clava una jeringuilla en el cuello a Enrique.
-Hermanos oprimidos, esto se viene y ellos no podrán hacer nada para evitarlo. Por que ya no podrán seguir manipulando nuestra vida en favor de sus caprichos y negocios, por que no vamos a seguir aguantando la miseria que dejan los juegos especulativos de quienes tienen muchísimo mas de lo que pueden gastar. Somos demasiados ya los que no vamos a guardar silencio. A continuar con la rebelión, por que ellos no harán nunca nada por nosotros, salvo exprimirnos hasta quitarnos nuestra vida. Ganaremos, eso se los aseguro. Buenas noches.- dice el hombre de la mascara a la cámara. La transmisión se ha cortado.
El tipo de mascara sale corriendo junto con varia gente en el lugar.




-¡GALLINAS ROSTIZADAS, CEREBROS FRITOS!- grito fuerte pero el portón no se mueve, miro a Sofia- ¿Han cambiado la clave?
-No que yo sepa...- Me responde. Grito una vez mas y no hay caso.- Aunque había operación masiva, se supone que quedarían varios aquí, como Kain, por ejemplo...
Me acerco hasta el costado del portón y noto que esta entreabierto. Lo muevo y entro, Sofia va tras de mi. Miro el piso y veo una gran cantidad de sangre, a lo lejos, en el centro de la fabrica veo una mesa. ¿Que esta pasando? Puedo ver cerca de tres cadáveres de maníacos esparcidos por el lugar. Me acerco, puedo ver la mesa. Sobre ella hay un cuerpo completamente despellejado y descuartizado. Esto lo he visto antes. La cabeza no esta despellejada, el rostro que veo es el de Kain.
-Joder Sofia, tenemos que salir de aquí- digo mientras doy media vuelta. Puedo ver el rostro del tipo en el psiquiátrico, el Despellejador, agarrando a Sofia con una mano y con la otra posando su cuchillo en el cuello de ella. Miedo.

-He ansiado este momento- me dice- ¿Te gusto mi obra? Retorne un poco a mi modelo clásico. Deje el rostro ahí para que lo vieras.
-¿Por que haces esto?-
-La muerte te esta pidiendo a gritos, yo solo hago mi arte- me responde jugando con el cuchillo.
-No la mates... estoy yo aquí, es conmigo-
-Seras mi obra maestra. Voy a tomarla como garantía para que nos encontremos en dos horas en el lugar que tengo preparado, en la mesa esta con sangre la dirección. Ven solo, y no hagas nada torpe o la preciosa dama se muere. También podría hacer una buena obra con ella.
-Esta bien, en dos horas, pero prométeme que no la mataras-
-La muerte te da su palabra, ya expuse los términos- dice mientras se retrocede llevándosela. Sale por la puerta de la fabrica y el silencio se toma el lugar. Veo una puerta abrirse, de ella sale Amelia con un terrible rostro de angustia. Tengo algo de miedo.

Delirio: el ser no es. (II)

Publicado por Gwynt.

Segunda parte, Capítulo II: El Caballo.

-Pero que pudiente, Sid. Cambiaste el auto.

-El negro pasa mas desapercibido y es mas facil de camuflar.

-Te juntaste mucho con Francesca al parecer.

-Oye ,Sid- transgrede I.K cambiando el tema del auto-.¿como están las cosas?

-Complicadas… En el recinto donde estabas tú- me mira por el retrovisor, y me siento paranoico, creo que me está acusando de algo. No me siento bien.- hay algunos hospedándose. Habilitamos habitaciones, camas, hicimos reparaciones, cañerias para agua y conexión eléctrica. Y bueno… estamos todos en inercia, esperando a que pase todo este exceso de acción para volver a lo nuestro.

-Pareciera que se organizaron bien. ¿Daire te ayudó?

-No. Daire… ella… - se complica al hablar, asi que presto atención.-está muda. Digo, mutismo selectivo. Desde que salió del hospital está sentada en el sillón de Gaspar, sin hablar, comer, o moverse de allí. Tratamos de acercarnos, pero comienza a gruñir. En su rostro hay una inexpresividad total…. Lynn me ayudó a ordenar todo.

-¿Quién es…- le doy un manotazo a IK para que se calle.-

-¿TU NOVIA? NI SIQUIERA TE INMUTAS AL DECIR QUE ESA SANGUIJUELA ESTÁ AQUÍ? GARG.- aparte de aguantar relaciones melosas, tener que aguantar a una mujer imbecil.

Llegamos, y salto por la ventana. El lugar está irreconocible. Pero que horror… Que alguien me mate ahora para despertar en otra pesadilla, en otra realidad donde tampoco encontraré mi sitio.

Entro sin golpear y veo a Francesca, que se acerca tímida y me abraza suavemente. Contengo la respiración, estoy sufriendo mientras me abraza, ESTOY SUFRIENDO. Cuando se despega me acerco a su rostro.

-SOLO ESTA VEZ.-SOLO ESTA VEZ.

Luego de mi grito, se abre una de las puertas (que antes no estaba) y sale Pete de una habitación (que antes no estaba).

-ALEEEEEEEEEX. MIRA, MUCHAS PUERTAS Y POCA NOVEDAD TRAS ELLAS.

-Las novedades están en todas partes, menos en tu puta mente.- reímos y nos saludamos con un brutal apretón de manos. Si, uno brutal, con luxaciones de deditos. Giro, y al mirar al living, veo a Daire, sentada, con la mirada perdida hacia algun infierno, y con cara de muerte. No se inmuta al escuchar mis gritos. Camino hacia ella y me detengo a una distancia “prudente”

-¿Qué tal la catatonia?  ¿Recomendable?

-…

-¿Más que la vida?

-…

-¿Más que el ideal, que … no se, saltarle encima al cadáver de Gaspar?- sus ojos se mueven, pero sigue en silencio.

-No responde., - Esa voz pomposa.- algún shock post traumático y mu..

-Mutismo selectivo. Ya sé todo eso, Lynn.

-Hola, Alex.

-QUE ASCO.- camino furioso hacia la entrada y choco con Sid.

-Veo que viste a Lynn.

¿Qué mierda hace ella acá? ¿Preguntarle a los explosivos sobre sus emociones?

-Vamos… cambió de opinión, ahora quiere ayudar y formar parte de esto.

-POR MI QUE SE JODA. –Lo empujo y me voy al jardín. Me siento sobre una roca a maldecir a toda la galaxia por estar mirandome y haciendome sentir culpable, y no se por que, sigo sin saber que pasa, pero todo esto… me siento asquerosamente solo y con ganas de gimotear y escupir sangre y que todos se ahoguen en ella.  Todo esto es horrible. Pasé tanto tiempo extraviado, confundido de mi propia identidad, alejándome desquiciantemente de todo, para llegar y construír algo de una grandeza sin precedentes, y que todo haya sido despedazado. Siempre lo mismo. Este ya no es mi lugar.

De la nada, aparece I.K, cámara en cuello, y me mira sonriendo, para luego acercarse, y entregarme una flor amarilla.

Pongo cara de ¿Qué?

-Lynn dice que siuben el animo- con un tonito sarcástico que me hace gracia. Me como la puta flor.

-Corre a decirle que ahora me siento florísticamente de maravillas.

-Será una inútil hippie, pero solo quiere ayudar.

-Esta vez no traten de dejarme como el bruto irracional. Ella conocía de este proyecto hace AÑOS, AAAAAAAAAÑOS. Dijo que era paranoia, y que todo estaba bien en el mundo, que la incapacidad era mía, para desenvolverme en la “vida normal”. ¿Te das cuenta del insulto?  A Gaspar le decía exactamente lo mismo, y el era brillante. ¿Y ahora cambia de idea? Lo aceptaría de personas inteligentes, no de psicologas laborales ridículas y acomodadas como ella, que solo ayudan a perpetuar el engaño. Es una espía, estoy seguro.

-Bueno, Sid como su novio ya sabría algo de eso, ¿no crees?

-Claro,porque a los espías se los follan y ya cuentan la verdad.

-Jajajajaja IMBECIL, lo decía por ese afán terrible de la gente melosa por compartir su rutina constante y tratar de fusionar su día a día en una extraña armonía y perdida de identidad.

-Odio esto. Todo Contacto… es motivo para generar debilidad, falsas ideas del ser, y arraigo antinatural. Es una espía, punto.-Cruzo los brazos luego de prender un cigarro. No puedo estar mas frustrado el día de hoy. No se cuanto mas pueda aguantar sosteniendo el yunque de los recuerdos cayendo desde mi nube.

-Si llega a ser espía, tenemos ventaja. Está conviviendo con nosotros. podemos observarla macabramente, y si algo pasa, culpamos a sus flores.

-¿SUS? ¿HAY MUCHAS?- I.K se levanta y se va al patio de atrás. Está repleto de flores.

-Me gustan más los árboles.- me lanzo a arrancarlas y pisotearlas. Es un bonito espectáculo. I.K saca su cámara y toma fotografías desde distintos ángulos. “El genocidio floral”, soy tan rudo.

-Esto es buen material para un fotomontaje,- vuelve a colgarse la cámara al cuello y saca un puñado de flores machacadas, que empieza a esparcir por el patio .-  Para algún gusano hambriento y famélico de colores.- me mira, y se va corriendo de vuelta al galpón.

Esa frase iba para mí, estoy seguro. PERO NO QUIERO COLORES. Estoy extasiado de grises.

Al entrar de nuevo al recito, la dinámica es terrible. Sid está en el computador, Pete está gritoneando a Lynn. Francesca en el living mirando a la taciturna Daire (se me adelantó en la catarsis, aunque ella lleva mas tiempo aguantando todo esto, merece su puesto esta vez.), I.K molestando a Martín. ¿Martín? Entro a su habitación.

-Compañero de sangre y batallas, no estaba al tanto de su presencia aquí.- le hago una reverencia.

-Que solemne, Alex. Igualmente. Soy un tipo silencioso.

-YO SÉ QUE OCULTAS ALGO.- grita I.K saltando en la cama.- ES IMPOSIBLE QUE TANTO MISTERIO SEA PORQUE SÍ.

-Mientras no sea un espía.

-No. Incluso, he matado a algunos. Simplemente soy introvertido,y creo que no por andar parloteando se dice más que cuando se dice lo necesario.

-Claro, pero Martín, casi nunca hablas.

-I.K, pasé semanas entre los gritos tuyos y de Pete, y no me interesa gritar. Prefiero observar.

-Excusas, no te creo nada. Y por lo demás, observar no va a alterar el rumbo de las circunstancias externas. Observar no implica compromiso de la contradicción. OBSERVAR ES LA COMODIDAD DE LA INERCIA, MARTÍN DATE CUENTA POR FAVOR.- chilla desesperada e indignada, y se va.

-Eh…pues… debo decir que tiene razón.

-Lo sé. Actúo cuando es el momento preciso y lo sabes, ya compartimos espacio de batalla.

-Si, y ha sido un agrado. Pero no niegues tus fantasmas.- y me retiro, asqueado de mi mismo por decir eso… ¿Cómo se puede criticar algo si se presenta dentro de el propio ser?

Lynn está sentada junto a Daire, ofreciéndole yogurt con avena

-Vamos, linda, deja de gruñir y come.

-Yo también te gruñiría si me ofrecieras eso. ¿acaso es una anciana?

-No, pero esto es comida saludable-me mira como loro, y vuelve a mirar a Daire, cuyo pobre rostro al fin refleja una conocida emocion suya: Ira.

-Oye, si quieres que salga de su estado, sigue así, y  te va a matar. ¡VAMOS, COME AVENA DAIRE! Jajajaj.

-Podrías ayudar en vez de ser el imbécil payaso de siempre. Es tu amiga. – imbecil payaso, que bonitos recuerdos de mi niñez.

-¿Qué sea mi amiga me hace responsable?

-Si te importase, ayudarías.

-Mira,- salto sobre el sillón y me siento en cuclillas.- tengo una teoría. Tenemos a Gaspar adentro. Me tocó el solemne y a ella el muerto.

-¿Esa es tu teoría? ¿No harás nada? – no entiende nada de psicoanálisis, seguramente se quedó sólo con la metáfora, ojala se atragante con sus colores. Cojo unas flores del florero y se las tiro.

-A ver si tus métodos la ayudan. No, pero en serio: sigue presionándola, de la ira, tal vez se convierta en un oso, te mate a ti, y nos libre de tu molestia presencia, espía de mierda.- ella me mira desafiante, y para imponer superioridad, se acerca a Daire y le deja la asquerosa mezcla de ancianos en las piernas.

Luego se vuelve muy tranquila y sonriente a su lugar y me mira engreída. ¿Qué se cree?. Voy a gritarle, pero Daire se me adelanta. Toma el pote, vierte todo el contenido en la cabeza y zapatos de Lynn, y luego tira el recipiente antes de volver a su catatonia.

-¡MIS ZAPATOS, MIS ZAPATOS! –Lynn corre desesperada buscando algo con que limpiarlos, y parece que le da igual que la papilla caiga por su cabeza descerebrada.- maldita, estos zapatos son sagrados, pero no espero que una discapacitada entienda, maldición- dice en voz baja.

-EJEM- le escupo literalmente en la oreja, para que sepa que escuché, y que soy omnipresente.- que gran psicóloga. ¿Tú eres la que mata a sus pacientes? Ten cuidado- me acerco y hablo de la forma más ronca que me lo permiten mis preciosas cuerditas vocales.- yo mato a cualquiera. Dame solo un motivo más, uno solo.- le arrebato un zapato, saco un cuchillo bajo mi manga y comienzo a descuerarlo, mientras la miro con odio. Así, ella me repudia, es mutuo, y es más fácil.

-De cualquier forma las manchas le dan estilo, eran unos zapatos horrendos, Lynn, haces todo mal. No seas una hija de puta. Todo lo que nos rodea es causal de miseria, menos unos zapatos.-habla I.K con la boca llena de globos.

-UVAS. DAME. AHORA.-me tira un racimo y me lo devoro, mientras saco al azar un globo de mi bolsillo- JA! ES NEGRO!- y se lo tiro a Lynn en la cara.

-Vas a pagar por esto, Alex. Ustedes, todos.- escupe Lynn a punto de llorar. ¿Por los zapatos? ¿O será este tipo de personas que lloran al enojarse? Eso nunca lo he comprendido. Si la rabia te da mas poder. De ser que no saben que hacer con tanto poder y se vuelven cobardes.

-¡Te traeré flores para que te alegres!- se despide I.K antes de que Lynn se encierre, y el ambiente deja inmediatamente de ser desagradable. Hasta que escucho a Pete.

-GANÉ. ¡GANÉ! JAQUE MATE.- mientras Sid mira el tablero sin comprender.

-Pero si yo era tan bueno…

-No te deprimas, hombre, hay jugadas y jugadas.- consuela Pete a Sid y le da unas palmaditas en el hombro.

-Sí. De todas formas, ya te voy a ganar. Pero ahora no- ve la hora.- Tengo que comunicarme con el nuevo director de los Batas Rojas.

-¿Y eso?-pregunta Pete mientras reordena las piezas del ajedrez.

-La organización de Gaspar.

-Oh, creí que así se llamaba. “La organización de Gaspar”

-Jajajaja. Muy autorreferente .De cierta forma nunca le gustó que los medios y el poder se centralizaran en él, pero… tenía ese algo. ESE TERRIBLE ALGO QUE TE INUNDABA HASTA LA BILIS.- No quiero seguir hablando de Gaspar. Otra cosa mas que trato de evitar y estancar. Si, soy un cobarde, me asusta más el dejarme llevar esta vez. Me doy asco, y de paso, siento que estoy perdiendo algo de Macon todo este temor ante lo inevitable.

-Hola, Arturo.- Sid está hablando en uno de estos aparaduchos, un notebook.

-Buena tarde, Sid- contesta una voz pacífica y elegante.

Arturo. Otro Lord de la caballería. No sé donde he dejado mi armadura y mi deseo de batallar. Solo quiero dormir, estoy agotado de la novedad que me llama a moverme por inercia con ella. Hace tiempo que no sentía esta derrota sobre mis hombros, y me entrego a ella. Me tiro escandalosamente al piso, y a la vista sorprendida de todos, (menos de Daire, cuyo mundo interior debe ser más catastrófico.) empiezo a arrastrarme hacia mi “habitación”

-Más que oruga pareces caracol- observa I.K, de forma acertada, Joder, estoy tardando mucho.

-Los caracoles algún día vamos a babear todo esto.

-Procura ser oruga y convertirte en dios de nuevo- se va a la cocina, mientras los demás me miran. Si los gusanos tuviesen tanta atención por arrastrarse…

-VOLVERÉ. LOS DRAGONES TAMBIÉN NOS ABURRIMOS- de un brinco me pongo en pie y AY, una puerta que cerrar fuerte.

Me recuesto en el colchón después de saltar en él – no solo por diversión, lo estoy amoldando. El descanso para mí es tan sagrado como mis eternas ojeras.- y me tiro. No alcanzo a parpadear dos veces y me quedo dormido, pero no en paz.

El escenario vuelve a ser la ciudad con los edificios destruídos y sus restos flotando. De mi brazo sigue emergiendo sangre, que al contacto con el aire, se vuelve gotas flotando y elevándose. Todo avanza más lento.

-No es más lento.Así lo estás percibiendo, para tratar de asimilar cuanto te rodea. Cuanto necesitas. Esta ciudad desolada, y la sangre. Oh, finalidades que diste a tu existencia. Pero nunca pudiste comprender el porqué, ni el porvenir presente a este devenir. No, aún no puedes hablar. Camina conmigo. La ira no es el motivo. No huyas más, no busques excusas. Al final, la contradicción se presenta hasta en el sociópata. Frustrado por como le obligan a presentarse y  actuar en una realidad primaria que no construyó, dispuesto a asesinar para derrocarla, pero con un fin positivo para todo aquel que se mantenga en vida en este mismo piso tan cargado de raíces humanas. Eres una oruga, Alex, aún no logras alcanzarme, no logras discernir mas allá del instinto, ni siquiera a este sitio.

Suelta unas risitas burlescas, y luego me señala hacia un lado del horizonte. Lo que veo no lo entiendo.

-Ahora puedes hablar.

Y se retira hacia el horizonte, de donde vienen un montón de humanos mutilados. Me resultan vagamente familiares. Es una hermosa reunión de todos a quienes maté. Su sangre sigue fluyendo, y cayendo al piso. Y a mi izquierda, la aparición me deja pasmado.

Gaspar me sonríe solemnemente, y sigue sacando fotos al desastre flotante. Le hago señas, desconcertado, para que se acerque, y en menos de dos segundos, aparece junto a mi.

-¿Cómo es que andas a ritmo normal y no más lento, maldito?

-Es muy sim…

-¿Cómo es que estás acá si estás muerto, además de todos aquellos zombies sangrientos? No… ¿es el Limbo? Es el limbo… y yo…oh, soy el demonio. ¿PORQUÉ NO ME LO DIJISTE? Pero tu deberías estar en el cielo de los psiquiatras. Que mierda, si luego de la muerte lo único nuevo es ser enterrado y convertirse en larvas. No eres larvas.- observa hacia el horizonte y suspira ,casi escucho el “dame paciencia” de sus pulmones.
- No a todo lo que has dicho. Soy una respuesta a tu necesidad, simplemente. Tal vez algun aspecto de mi carácter, o la estabilidad que representaba en tu vida te llevaron a recrear una imagen mía en el subconsciente y las alucinaciones. Lo demás, asociado con lo que te han dicho sobre la oruga del instinto… y bueno… piensate porque estoy aquí. Guarda silencio largo rato, con su cara de TE VOY A LEER EL PENSAMIENTO, y rápidamente me saca una foto.

-No paparazees al demonio, IMPRUDENTE jajaja. ¿Y porqué avanzas a ritmo normal? Al final… todo este sitio es creación subconsciente mía, como tu, sin embargo, mira mi sangre.

-Si, de hecho, te estás poniendo azul. Porque tienes conciencia de mí más que de ti mismo. Mira tu sangre, no fluye con la rapidez usual… tal vez sea tu conciencia de una parte de mí presente dentro de ti. Todos compartimos rasgos de personalidad… Alex…- gira perturbado a mirar hacia arriba.- Escucho gritos afuera. Deberías despertar.- De pronto, vuelve a aparecer ella, con parte de la cabeza de uno de mis muertos.

-Mira, este tiene despedazada la mandíbula, ¿te acuerdas?- lo miro con horror… el recuerdo… mierda. NO, NO NO.- Gracias a él. - acerca la cabeza a la suya y la acaricia con cariño. Bajo la vista, todo está lleno de espesa sangre, inundándome, y la mía cae como aceite a ese mar rojo. Ella me mira, despiadada.- DESPIERTA.

Despierto de golpe. Hermoso, tengo un psiquiatra en mi limbo y de asesinados que deseo volver a asesinar. Ni siquiera tengo tiempo para pensar en todos los símbolos que estan presentes en este universo onírico tan repleto de todas mis fantasías, y tan coartado… algo hay. Fuera de esta jaula se escucha un gallinero. Abro con fuerza la puerta y la arranco. Todos voltean a mirarme, y vuelven a espectáculo principal. I.K tiene arrinconada a Francesca, mano en su cuello, gritándole.

-¡DILO, MALDITA SEA, DILO! ODIO TU PUTO SILENCIO, TERMÍNALO. – Francesca la mira asustadísima, tan frágil. Me acerco, y toso, a lo que I.K responde volteando, furiosa, y le pongo cara de ¿Qué pasa?

-Pasa que esta tipa tiene una idea potencialmente brillante, y no la quiere decir, o no puede, pero YA ME HARTA SU EVITACIÓN. Esta vez no va a hacer el ridículo y no quiere ejercitar hablar.

-¿Y sometiendola violentamente harás que estructure su idea y la diga?

-CALLATE. Tu no entiendes, no estabas acá. – vuelve furiosa a gritonear a Francesca.- Por tu cobardía están dudando de mi, ¡HABLA!

De pronto se escucha un alarido que no proviene de nosotros tres. Volteamos, sincronizados, y la imagen es nueva, pero no desagradable, para mí al menos. Daire sentada al borde del sillón, mirando con todo el odio del mundo a I.K. Todos nos quedamos estáticos, esperando a ver como vuelve a acción esta protagonista. Claro, yo sigo en inercia, pero por dentro estoy empujándola a avanzar, prendiendo la hoguera.     

Daire se levanta lentamente y con dificultad –dos semanas sin moverse pasan la cuenta, pobres musculos.- , pero si dejar de mirar a I.K. Ella le espera, siendo que podría irse corriendo y gritando

-La momia regresa… -si, eso mismo, I.K

Cuando se encuentran frente a frente, estoy eufórico, pero incapaz de moverme. Es que este no es mi momento.

-Suelta a Francesca.- Su voz se oye ronca y grave, ante lo que I.K responde con una burla.

-Vete a aullar, Daire, no quiero un zombie aquí.- tan rápido como imperceptible, Daire ahorca a I.K

-Te ordené que la sueltes.- entre dientes, a lo que I.K se rie, y asume al podo comediante su derrota, soltando a su presa.- Bien.- ahora Daire suelta a la suya y todos pasan de ser cazadores a ser nada.- Todo este tiempo, de lo poco que recuerdo, hemos presionado y castigado a Francesca por ser como es. ¿Ayuda eso en algo más que causarle más temor? NO SOMOS BESTIAS. Eso es lo que ellos creen que creamos porque somos una amenaza para ellos, y nosotros lo asumimos, y asustamos a alguien cutas respuestas inmediatas son distintas, incluso retraídas, pero porque es SU NATURALEZA. Nuestro discurso se desmorona con esto.- Vuelve a su asiento después de coger una cerveza y abrirla con los dietes.-  Las cosas tienen que cambiar. Tenemos que rompernos…

Cuando dijo eso último, algo me dijo que la situación insostenible no estaba solo dentro de mí, sino que en ella también. Y si embargo, cada vez aquí dentro me voy sintiendo más y más solo. Volteo a ver a Sid, que o ha alcanzado a cortar la llamada en línea con Arturo, y veo un hombre-pantalla observando ansioso.

-BUENO, YA HAS VUELTO A ESTE PUTO GALLINERO.- le dice Pete a Daire y se sienta junto a ella.- Tenemos mucho que hacer. Los edificios están ansiosos por desplomarse.

-Antes tenemos que reorganizarnos.- Soy una oruga, que asco. Tal vez Pete se robó mi praxis. Me acerco a Francesca.

-Oye, chica – le sonrío- ¿cuál era tu idea al final? Dímela como se te de la gana, no importa si no la explicas.- aaaaaaaaaaaaargh. Me siento como profesor de Kinder tratándola así. ¿Dónde estaba la mente de Daire durante su catarsis, en Disneylandia? Horror, capitalismo infantil-PATOSREPTILES.- Si, lo he dicho en voz alta.- eeeeh… ¿la idea? – le muestro mis hermosos dientes amarillos. A ver si la hipnotizan.

-Bueno… - duda y camina hacia el tablero de ajedrez.- Solo dije que nosotros podríamos ser El Caballo.- y recordé la heroína… aaah…que divinidad.

-¿Qué? – no entiendo- no entiendo – es que no entiendo.

-El peón nunca gana, y avanza de forma limitada. El caballo es como la fuerza militar. Pero podemos serlo nosotros, con las nuevas armas de la modernidad, y potenciarnos co los peones.

-Y DEVORARLE EL BRAZO A LA REINA Y AL REY.- salta Pete y tira las piezas del juego por el aire.

-No dio toda esa explicación antes… yo solo quería que se expresara- dice I.K molesta, asi que “empatizo con ella”.

-Tranquila, yo la he machacado en el piso.

-Si, si.. el silencio es su puta forma de entusiasmo, POR LO DEMÁS, SEAMOS JODIDOS CABALLOS SALVAJES Y AFILADOS.

-Caballos modernos.-dice Dairie en voz baja, y se acerca sigilosa.

-¿Dejarías de andar así? Pareces pantera, No me gustan- da un paso y me mira burlesca.-¡QUE LO DEJES, TRAGEDIA! En fin. Modernos… por supuesto, de alguna forma hay que ocupar los espacios disponibles para generar la controversia. Como los medios de prensas, las asambleas y esas labores citadinas cotidianas tan corrompidas.

-En la prensa del muchacho ese- señala Daire a Sid con desdén-pueden ayudar.

-No creo… hay un límite… de lo contrario, podría perder mi licencia de periodista.

-¡OH, POR FAVOR! ¡¿A EL SI PUEDO PEGARLE!?- I.K se sube las mangas y lo mira con odio, para luego aterrizar a nuestra charla.

-Es necesario, para recopilar información-responde Sid con tono de excusa… clo-clo-clo. Que pena que no tengo maíz para darle a esa gallinita. LA VOY A DESCUELLAR.

-SE PUEDE SABOTEAR AL SISTEMA DENTRO DE ÉL. TIENES LAS ARMAS Y PREFIERES LAS FLORES. GASPAR ESTARÍA AVERGONZADO. A él dejémoslo de peón. .IK, pero que elocuente.

-A el y a Lynn. Ha quedado claro que ellos planean marginarnos, o que no estarían dispuestos a que corra sangre- comenta Daire, en extasis por tomar un cuchillo en semanas y…. asesinar una manzana.

-A ver ahora si Sir Arturo, caballero de los Batas Rojas nos empoderar.¡AFILEN SUS ESPADAS!

Yo quiero ser Sir Muerte y Olvido, de las Tierras solitarias de Ningun Sitio.  Daire me mira y me habla solo a mí esta vez.

-Seremos los centauros rompiendo el mundo, Alex. No importa que se nos esté destruyendo el cielo, y raíces nunca antes vistas tengan frutos tan podridos dentro de nosotros mismos. Antes de caer, esto va a arder.

-¿Frutos podridos?

- Me he acomodado a mi mente. Ya no sé lo que hay afuera.

Continuará.

Delirio: el ser no es (I)

 Publicado por Gwynt y todos los personajes que se apoderan de sus largas noches de pesadillas.  (Sociedad Anónima prrrrrrrrrrrrrrrrrresenta!)

Delirio: el ser no es. (Si,la segunda parte de "el ahora no es", un aplauso por favor.)

Capítulo I: Cuestiones determinadas.

No sé que pasó ayer, ni que pasó en algún momento atrás. Mi último recuerdo es el del golpe en la cabeza, y ahora esto. Estas paredes – que rasguño, pero no siento mías.- son tan blancas, y pese a sentirme podidamente torpe y limitado, sé que esto es un psiquiátrico que desconozco. Vamos, soy Alex. De equivocarse ni hablen, ni lo piensen. Porque sus pensamientos los escucho. Estoy en todos sitios… estaba. Hoy estoy solo aquí. Oigo pasos. No son pensamientos, es un inmundo humano acercándose.

-Buen dia… Alex.- dice la enfermerilla , luego de leer mi ficha y hablar con tono de robot.

-QUE-TIE-NEN-DE-BUE-NOS. le respondo, como robot también, para sin-to-ni-zar.

-Vamos, hay un sol precioso afuera.

-Oh,si, lo disfruto enormemente desde acá. Además, Sol asqueroso acelera el cáncer en la piel.

-Pero… no seas pesimista, es a largo plazo.

-Por eso. Es un asesino silencioso, le gusta la agonía, y a mí también. No hay espacio para dos soles en este mundo. CIERRE LA CORTINA- Se exalta y la cierra de prisa, antes de regresar junto a mí.

-De todas formas, te ves mas despierto que ayer.

-Ayer no era yo, porque no recuerdo nada. Tal vez era mi personalidad payaso.

-¿Qué? No he visto ningún payaso….- la interrumpo, y saco de debajo de mi almohada un puñado de globos.

-ENTONCES DIGAME QUE SIGNIFICA ESTO. Porque el hada de los globos no existe.

-Eh… creo que será mejor que llame al doctor.- La tipa está asustada, pero se lo merece. Venir a dudar de mí. Desaparece y al rato vuelve con un anciano cara de cerdo.

-Buen día, Alex.

-OINK.

-…Bien. La enfermera me cuenta que estás algo alterado.

-NO, YO SOY ASÍ.

-Los últimos días habías mostrado avances en el tratamiento.

-Avances inducidos unicamente por los fármacos que se apoderaron de mi. No “respondí al tratamiento”.Debo haberme creado un ser alternativo estos días, ante el trauma del sometimiento. El yo payaso.-le inflo un globo rosado y se lo entrego.- OINK. No tengo perdida de razonamiento. Sé perfectamente quien soy a veces, quien no soy, que usted es mitad cerdo y que algún día el Sol tendrá mi rostro.- se alejan y cuchichean entre ellos.

-Hablas sin coherencia. Estás histérico. Habrá que aumentarte la dosis, pero ya que estás lúcido, no será intravenosa.- intrave… ¿qué? Reviso mis hermosos antebrazos.

-ASQUEROSOS IMBECILES. ESTOS SON SOLO PARA DROGAS DE VERDAD. Shhhhht, ya pasará…- acarició los puntitos rojos.

-Alex, estabas en un buen proceso y con excelentes evaluaciones. Si sigues así, saldrás muy pronto.- nauseas. Presiento queme desconectaré de este momento, así que solo asiento, y ellos se van.

El, el cerdo, y yo la gallina. Esto no es un hospital, es una granja idustrial.

Uusalmente la sombra de la protagonista de mis alucinaciones no se aparece, a menos que haya algo que esté evitando, y ella lo escupe, de la forma melodramática e invasiva en que suele actuar. Quiero que aparezca, a ver si me saca de este sitio, que no es mi terreno. No tengo plan, ni dirección, ni una meta que cumplir. Estoy por encierro… y eso… eso es la desesperación. El encontrarte ante cada idea con una pared de contradicciones internas cuyo resultado es la praxis, y que de alguna forma ésta se encuentre constantemente determinada por lo externo. Y a fin de cuentas, interiorizamos lo que vemos como aquello que se conforma dentro de la imagen mental. Aceptamos las paredes y barreras y entrenamos a nuestras glándulas de adrenalina para ser señal de huída, ante el falso interés y el inventado apego que le tenemos a la vida. Nuestro propio ser se va degradando hasta convertirse en una herramienta para el goce de los sentidos. Pretendemos olvidar la entropía que se nos presenta tanto en el fenómeno como en el propio pensamiento. YO NO VOY A VENDER MI TIEMPO. Porque mi tiempo no existe. En el pasado y en el futuro no se localiza la voluntad. Y yo soy concordancia en cada maldito segundo que niego y maldigo.

De tanto rato pensando en la misma postura, se me entumecieron las extremidades. Para recuperar el a-rritmo, echo a correr por los pasillos. No más constipación mental, y acelero. Yo lo sé, tengo ruedas.

De la nada, aparece el doctor Cerdo, e intenta frenarme, alterado, a lo que por instinto respondo empujándole por los hombros mientras le desestabilizo las piernas. Cae como un saco de patatas podridas al piso, y yo, que salto sobre el y vuelo libre, comienzo a aletear.

. ¡NO SOY UNA GALLINA, SOY UN FÉNIX! OINK OINK- que momento de gloria. No me importa ver que estoy dirigiendome como proyectil hacia la ventana. Mejor todavía, ¡podré salir!.

Choco, y el golpe es seco, en lo que no parece ser vidrio, sino concreto. Una enfermera corre a auxiliarme

-NO ME TOQUE. No pedí ayuda. – me cuesta hablar.

-Está sangrando , por la frente, necesita ayuda.

-¿Qué tiene de malo sangrar? ¿No es este nuestro privilegio como seres vivos? ¿Sangrar, sentir dolor?¿Le teme a nuestra propia humanidad? ¡AQUÍ HABÍA UNA VENTANA!

-… No, no la había. Al parecer el golpe ha sido fuerte.- respiro, y trato de mantener la calma o voy a hiperventilar y sacarle la cabeza con las manos. Donde había una ventana, solo hay una pared de concreto, con mi sangre. LINDO DETALLE, FENIX ALEX. No pueden haber corrido la ventana tan rápido… Cállate, cállate. La enfermera, finalmente, me ayuda a ponerme en pie y me lleva a la sala de suturas.

-Listo- dice concentrada luego de cortar el hilo.- Son solo cuatro puntos, crecerá el pelo nuevamente.

-¿Crees que no lo sé? No es primera vez. Tengo tantas cicatrices como malos pensamientos.

-¿Siempre eres así? Digo… ese humor. No parece enfermedad.

-¿LO DICE EN SERIO? QUE HERMOSO MOMENTO, Gracias por notarlo.- Al fin alguien que no me acusa de maniaco. Es imposible una manía eterna, tanta dopamina, yo lo sabía, por supuesto, soy el fénix más inteligente, pero oír a alguien darme la razón es extasiante.

-Sí.- sonríe y deja los utensilios sobre una bandejita.- El doctor te estaba buscando antes, porque tienes visitas.

-¿He tenido visitas estos días pasados y olvidados?

-No. ¿Crees poder levantarte?- inmediatamente extiende su mano, dispuesta a ayudarme.

-¿Ese es su estilo? ¿Creer que todos son débiles de antemano? Puedo moverme, señora, estoy grandecito.- y me largo saltando a la sala de visitas.

-Alex, que gusto verte.-  Sid habla, Francesca solo mira.

-Sid, dime ahora como llegué acá.

-Los vecinos llamaron. Debieron ser más silenciosos.

-JA. ¿SILENCIO? La consumación de un ideal se celebra, Sid, no se deja pasar por miedo a consecuencias.- De un maletín, saca un periódico, y me lo entrega. Lo miro con recelo, y se lo quito rápidamente.

-Página 6, noticia del…

-POR LA MIERDA SID, SI SÉ LEER.. se muerde los labios en señal de perdón. Ojalá se los rompa.

“Un grupo de antisociales ha generado gran escándalo en la ciudad, alterando el orden y la paz. Aún no se sabe la identidad de los mismos, que participaron en el atentado de un hospital psiquiátrico, pero autoridades aseguran que también fuero los causantes de los actos delictuales ocurridos el mismo día en el Banco Central, el Ministerio de Salud, y la sede del Partido Izquierdista. Hasta ahora, análisis especulativos apuntan a que una de las sospechosas sería aquella antisocial llamada “Daire”, que semanas atrás causó revuelo en un evento de la Izquierda. Sigue siendo buscada por las autoridades pertinentes.

Vecinos del sector del Hospital atentado cuentan que al parecer, hubo una rebelión de los discapacitados mentales, que fulminó con una cantidad de funcionarios de la Salud del Estado brutalmente asesinados y calcinados dentro del sector. Los pacientes fugados están siendo buscados por ser un peligro para la ciudadanía. Psicólogos sociales analizan la situación y solo concluyen en la teoría de que estos individuos, al ser marginados social y culturalmente, han perdido el enfoque de interacción regular entre la gente, bestializándose, y han recurrido a tomar acción de venganza. Los transfondos ideológicos que pudiesen existir en estos atentados terroristas son improbables, ya que al ser enfermos, presentan una incapacidad del uso de razón.

Con uno de ellos posiblemente identificados, esperamos que se apaciguen las novedades, y que podamos volver a nuestra cotidiana vida de trabajo e inercia sin que un cretino insano amenace nuestra gran supremacía y balance burocrático.

Esperemos que estos atentados no afecten a nuestra posición en el Sistema Internacional, y los daños en infraestructura – cuya reparación costará millones de pesos- tomen un corto periodo de tiempo para volver a su funcionamiento. A los sectores políticos les parece una situación minima que no tiene el alcance suficiente, pronto les informaremos de las novedades.”gbakgjkajhljrLFJAELIRJHMSMJ.

-Arrugo el papel asqueroso y lo vuelvo un acordeón que agarro a mordiscos.

-ESTO SABE MUY MAL. -Escupo a los pies de la muda Francesca.-  Nos descifraron, y dieron vuelta el discurso así de rápido…-Entonces todo esto solo ha servido para fortalecer las ideas y estructuras imperantes? Hijos de puta, dieron vuelta el tablero del juego y quedamos como una manga de peones sin Rey y sin salida más que…

-Esconderse y actuar con sigilo, probablemente sea sabio.

-NO QUIERO JUGAR A LAS ESCODIDAS. Mierda, Sid, ¿qué te paso?

-Como periodista he visto muchas cosas…

-No juegues a ser vejestorio. ¿He visto poco yo? ¿Cuándo es suficiente según tú? ¿Te recuerdo acaso quien solía ser yo? Todas tus investigaciones, tus bases teóricas, MIAS. Asi que si ese es tu estándar, también he visto “MUCHO”.- No me gusta recordar que alguna vez fui un apreciadisimo y brillante sociólogo, pero a estos hijos de puta solo les convence el título profesional de alguien para saber si es digno de respeto o no. Yo merezco respeto por mi genialidad en su totalidad, no solo por un título.

-Si, lo sé… perdona, Alex. Eres muy capaz, pero estamos en aprietos, y no sabemos muy bien que hacer afuera con Francesca, Daire y los demás.

-¿¡QUE!? Retrocede. ¿Daire y los demás están afuera?

-Ah… si… se rasca la nuca y rie nervioso.- olvidé decirtelo. Daire entró con el estómago lacerado por una costilla rota, de urgencias al quirófano. Le dieron de alta luego de eso. A Martín y Pete los sacamos hace una semana, no había motivo para que los mantuviesen retenidos, y la policía con sus sospechas nada pudo hacer. Solo quedas tú e Irene.

-¿Irene?

-I.K-corrige Francesca.

-Queremos sacarlos, y pronto, Alex. Pero tienen que poner de su parte, en especial tú.- Sid habla, pero ya me aburre, solo lo miro, le rugo, y miro a Francesca. Se pone nerviosa y aparta la mirada

-YA SE QUE PASA.- Salto frente a ella.-Te asusto, me viste asesinando y te asusto, quedaste en shock.¿Estás igual con los demás? Linda interacción en el galpón, entre evasivas y tiritones.- ella suspira, y me mira.

-Alex, por favor, ayudanos a sacarte de aquí. No ha de costarte mucho pretender ser normal..- estoy horrorizado.

-NO, NO COSTARME. ME ES IMPOSIBLE NO SER QUIEN SOY. ¿Quién me propones que sea? ¿Un inepto? ¿Un cobarde? Anda a jalar cucarachas antes de insultarme así. YO-NO-PRETENDO. ¿Se les ha olvidado a todos acaso que no manipulamos nuestro carácter por conveniencia? Somos pulsión acognisciva. Y mi pulsión primaria es ser, no aparentar, no evitar, no engañar. Engañar implica ocultar algo que pareciera ser inapropiado. YO NO SOY INAPROPIADO.- Me voy a una esquina sin luz de la sala, y me tiro al piso, enojadísimo. Me siento ensuciado por sus propuestas. Sid pone cara de gran pensador

-Por ultimo haz teatro aquí, y convénceles de que estás de acuerdo. Es un juego, y tu libertad depede de él.Todo lo que planeas está afuera, Alex. Eres un gran estratega, hazlo.

-Y te necesitamos de vuelta- susurra Francesca

Reflexiono en el piso, y de pronto, comienzan a desaparecer las paredes. Quedo sentado en una calle oscura, rodeado de edificios oscuros, y un cielo anaranjado… Respiro y no siento nada.

El cielo no suele ser tal desgarradoramente bello… no de nuevo. La jodida y dulce macabra ahora no.

La gravedad se vuelve pesada sobre mí, obligándome a quedar tumbado, boca arriba, y lo peor, totalmente indefenso, como me siento en verdad aquí.

Los edificios comienzan a desintegrarse silenciosamente, y cada partícula se mantiene flotando, elevándose. Hasta las sombras se dispersan. Lo único en el piso es lo que parezco ser yo. Sobre mí, flotando, aparece ella, con su sonrisa macabra de siempre, y su estela de humo negro tan tóxico. No puedo ni siquiera tratar de moverme para librarme, me imagino como si mi cerebro se saliera por mi nariz. Oh, mi inteligencia…

-¿Te agrada el lugar? Se que sí, pero estás tan desconcertado que no comprendes. Esto somos en verdad, querido. Partículas dispersas. La unión no hace el todo, ni una confabulación, menos aún un precepto universal. Pero somos dispersión. Sé que sabrás que hacer con todo esto. Con este único ser percibiendo este mundo e interpretándolo, estás encadenado en el piso sin poder elevarte al poder de tu propia voluntad. Alex. ALEX. Tu eres dispersión, junto con esto. No te engañes por lo que la jaula de tu corporalidad te dice. Está desesperada por poseerte. Sin tu mente, el cuerpo es inerte, los sentidos están desconectados. Solo-esperar-la-muerte.

Se acerca a mí, riendo entre dientes, y con su filosa uña me hace un corte en el brazo. La sangre oscura sale a gotas, y se eleva cada una de ellas contra la gravedad.

-¿Ves? HAZ LO QUE TIENES QUE HACER. Juega. No te quedes en el piso porque crees que es Lo verdadero y auténtico. Esto implica mucho más. Te necesitas. Mueve las piezas. Despierta. DESPIERTA.

Parpadeo hasta enterrarme las pestañas. De vuelta a la sala con las visitas mas tediosas del planeta.

-Yo me necesito, Sid. Haré lo posible, buscaré a I.K. Pero vienen mañana por nosotros.

-Pero…

-MAÑANA. Pides autorización de Lynn – si, la psicologa imbecil que me presentó a Gaspar, es la novia de este tipejo- o del Jefe de Salud Mental del Ministerio, o al PAPA. Me da igual. Mañana.

-Lo haré.- hablé con liderazgo, es obvio que no puede negarse. Hace falta un lider, como Gaspar…

No, basta. No soporto pensar eso, asi que me voy. Que lindo, todos afuera y yo acá. Escucho la voz del fatalismo riéndose, y siendo atropellada al cruzar la calle. Sobre Gaspar no quiero pensar mucho. Gran parte de lo que logré fue gracias a su impulso. Al menos me queda eso. Eso y todos los cuchillos que me regaló, un buen amigo hace eso. Basta. Me meto las manos a los bolsillos, y caen montones de globos. ¿Qué mierda?

¿Hago shows acá? Me agacho a recogerlos, cuando veo un par de pies frente a mí. Alzo la vista.

-¿No te vas a parar a saludarme?- respondo recostándome en el piso boca abajo, ordenando los globos como se me da la gana. I.K suspira.- Eres tan predecible.- y se sienta frente a mí.

-¿Te gusta tomar sol en el pasillo? Es un relajo. Ojalá una camilla me parta por la mitad.

-Una camilla con un obeso encima tal vez pueda. ¿Porqué los globos?

-Porque… verás… creo que me disocio en un payaso. No se de adonde salieron.-Toma uno y lo mira mientras tuerce la boca.

-Podríamos llenaros de saliva y sangre y tirarlos para matar el tiempo.

-Oh, verdad que tambien eres una homicida; MATAR GENTE CON GLOBOS.

-LOS GLOBOFOBICOS LO SABEN- se altera, aprieta los dientes, y con un suspiro, se relaja- Guárdalos, tal vez haya enfermeras con aversión a los payasos.

-O enfermeras con aversión a los que saben el secreto de los globofobicos.

-O ENFERMERAS CON FOBIA A LAS ENFERMERAS. Yo me tendría fobia. Pero solo soy un hada oscura, no les temo a sus artilugios. A esa que va allá – apunta hacia el fondo del pasillo, y giro como zarigüeya a mirar- le enterré las jeringas que me quería inyectar. Debió ser sedante de oso gigante, porque se desplomó. Y como al despertar, no se acordaba, la convencí de que se lo clavó por accidente.

-OGH, TE ESCODISTE, ¡PORQUE!- me están castigando.

-Porque no veo funcionalidad en estar acá. Prefiero enfocar mi genialidad en salir, para volver y REVENTAR LOS VENTANALES DE UN GRITO- Pega un salto y se pone en pie moviendo los brazos y riendo. Lo que dijo me recordó a o que me dijo “la macabra”.Me hace sentido.

-Finjamos por hoy. Mañana nos sacan.- se descoloca y me mira con los ojos inmensos.

-BIEN. Es mi hospitalización más corta. Dejaré algún recuerdo.

Echa a andar por un pasillo, y saltando voy junto a ella.

-¿Recuerdo?

-Algún dibujo en la pared…

-¿Con sangre?

-Claro…¿Porqué no?

-Yo voy a escribir algo.- en la espalda del doctor Cerdo con un cuchillo.

-¡PUES VAMOS! Demosle arte y capacidad de voluntad a este antro,¿en que sala?

-JODER. A una vacía. ESTA ME ESTÁ LLAMANDO.- tiro rápido dela puerta y entro transgresivo.- APÚRATE.

-Ya voy, me gusta entrar despacio. Invado de a poco el sitio.- llega junto a mí, y saca una pluma de su bolsillo.

-Creí que sería con sangre.

-No- me mira indignada y suelta con gracia-, eso no va conmigo.

-COBARDE.- la miro asqueado y volteo, me corto, y con la punta de un lapiz seco escribo.

“Esta tierra de nadie atestada de silencio merece el estruendo de un demonio, ansiando mañanas de sangre y alcohol. Paredes como resguardo de la miseria, tienen fecha de vencimiento. ¡MIREN! Se me pudre la carne, se me acaba la vida. Pero mi muerte no la van a presenciar”

Me frustro por el intento mediocre, me he indignado. Me alejo a ver lo que ha hecho I.K, mientras ella lee mi basura.

-Oye, eso está ingenioso.

-POR TU CULPA QUEDÓ TAN MAL. NO ME HABLES.- Ella dibujó una mujer con los brazos abiertos, extendidos, desde un abismo, donde se asoma una ola oscura, inmensa. Algo no va bien, asi que me voy a “mi habitación”.

Me recuesto relajado a leer un libro de Nagel, y he aquí mi disfraz: no le grito al libro, solamente le debato en voz baja. Le gané en un par de argumentos, y me siento más seguro respecto a que el mundo sí existe. El dilema soy yo.

Me interrumpe el doctor Cerdo.

-Alex, ¿cómo estás?

-OINK OINK. QUIERO COMER TOCINO DE TU CABEZOTA.- Hola doctor, bien. Debo disculparme por lo ocurrido antes. Hace tanto no estaba lúcido, que he hiperventilado.

-Oh. - Se sorprende, y yo tambien, porque esa respuesta mia fue automática.- , no te preocupes, no ha sido nada. Venía a hacerte un chequeo general, y de paso preguntarte por tu golpe en la cabeza.

-No presento lesiones cerebrales al parecer, mi presión intracraneal esta estable, ni tengo un TEC. Fuera de peligro, estable, y tranquilo.- PERO SIQUIERE USTED UNOS BUENOS PUNTOS EN EL CEREBRO, AVÍSEME.

-¡Fantástico! Me agrada ver tu avance, Alex. Bien, iré a seguir con la ronda.

-Adelante, doctor, gracias por la preocupación.

Me pongo cara de incomprensión mientras se cierra la puerta. ¿Qué fue todo eso? Sonó como Alex el sociólogo… o como Gaspar. Tengo un Gaspar adentro. Es la explicación. Yo quería gritarle y no pude porque me volví un Lord. NO, yo quiero ser el plebeyo que dirige a la masa descontenta. Ya pensaré en lo que sucedió acá, por ahora, solo quiero dormir, y no por drogas o alcohol o intravenosas, sino que por decision propia.

Al menos la macabra no saboteó mis sueños.

Cuando despierto, está Sid hablando con el dr. Cerdo, y me muevo bullicioso para que me noten. Lo logro, voltean y Sid sonríe mientras asiente.

-Buenas noticias, Alex.

-¿Qué? - ¿YA SE DIO EL BAÑO DE BARRO?-¿Qué sucede?

-Puedes irte. Acá tu amigo te ha traído algo de ropa. Ha sido un agrado tenerte acá.

-Gracias por vuestra paciencia,sé que o soy fácil de llevar.- PUAJ.

-Al contrario, has sido un gran paciente.- sonríe y se va. Gaspar lo abofetearia por ser el peor de los psiquiatras. Argh. Sid me lanza el bolso y me visto rápido.

-Sid… ¿Qué es esto?

-Ropa de Gaspar-me mira, taciturno, debo tener cara de asesino.

-Oh, excelente, ahora tengo disfraz de hipster. ¿Me trajiste sus lentes y su bicicleta tambien?  ¿Cuál es el jodido sentido?

-Tranquilo… es que salí rápido y eso todo lo que encontró Francesca… Oye, tienen un aire tu y el…

-No me jodas, zángano…Oye, ¿Dónde está I.K?

-Esperando en el hall. No se tardo tanto en vestirse y quejarse como tu- y sonrie burlesco el desgraciado.

-TENGO QUE ESTAR CÓMODO. Pero bueno, esto parece ser cómodo.- me elongo y salto, y la ropa me acompaña. Hoy será un MUY BONITO DÍA. Salimos al hall a encontrarnos con I.K.

-Vaya, que guapo.

-Lo sé. Pero como que vuelvas a piropearme, te arranco los dientes con un tenedor-Me acerco a mirarla, desafiante, y luego avanzo hacia la salida. Odio comentarios sobre apariencias.

-Hey, Alex-me grita Sid a mis espaldas.- ¿No te vas a despedir del lugar?

-¿Y EN QUE PUTO MOMENTO LO SALUDÉ?

Continuará-.

Bienvenida Sangrienta Malvenida

Bienvenida Sangrienta Malvenida: Tercer Movimiento: Quinta Parte o Tejido causal.

Por: Prometeo


- ¡Sofia! ¿Estas bien? Me tenias preocupado- escucho a través de un teléfono que me han entregado los Maníacos.
-Si, todo en orden, quédate tranquilo Hernando...-le respondo tratando de controlar mi tono- llamaba para avisarte que estoy bien... han ocurrido un par de cosas... hablaremos en cuanto nos veamos, hoy me quedare aquí...-
-¿En la fabrica? ¿Estas segura que estas bien?- insiste.
-Si, todo va bien...- mentirosa- te prometo que me pasare mañana
-Bien, nos veremos entonces...-
-Me tengo que ir ahora...-
-Te quiero...- suena la otra voz por el teléfono.
-Yo también... adiós- Cuelgo y regreso a la habitación con Kain.

-¿Todo va bien? ¿Estas lista?- me pregunta. Me siento frente a el, en el piso, y miro un jarro con el liquido verdoso.
-Creo que estoy lista... un poco nerviosa, pero preparada-le respondo.
-Estaré contigo en caso de cualquier complicación- me dice. Tomo el jarro entre mis manos y lo acerco a mi boca. Comienzo a beberlo lentamente, el sabor es repulsivo.

- Oh Diosa Libertad, toma entre tus brazos a tu seguidor,guía su voluntad a través de los mares del innombrable deseo,que la luz de la verdad barra con la falsedad implantada en esa conciencia,que su corazón vuelva a latir tan profundamente como lo hace tu existencia trascendental

He vaciado el jarro, tengo una horrible sensación de nauseas, coloco mi cabeza en la cubeta esperando la explosión. Y ahí viene, el vomito sale a chorros mientras el recuerdo de los días de angustia luego de la partida de Laura regresa a mi cabeza. Todos los pantanos en mi interior luchan por salir.

-Vuela libre, vuela al susurro de tu verdadera eternidad...

Cierro los ojos y me acuesto en el piso, siento que esta lleno de agua, comienzo poco a poco a hundirme, hasta que quedo completamente sumergida. Abro los ojos.


Veo la calle empedrada de mi viejo pueblo. Estoy sobre una roca y junto a mi esta Laura. Creo que esto lo recuerdo...
- Esto lo tienes que recordar, querida mía, tu si entiendes. La única manera de reafirmar la voluntad es siendo quien verdaderamente eres. ¿Que sentido tiene el prolongar la existencia para construirte como algo que no eres? Cuando acaban siendo lo que no son, pasa esto, el mundo se degrada. Y así la moral se hegemoniza, y así te apuntan con el dedo por ser quien verdaderamente eres. Se han enceguecido tanto en la comodidad que han decidido ocultar la verdad para no sentirse culpables. Así  sus normas de cortesía se fundan en la hipocresía  esta gente convierte la mentira en un estilo de vida. Tienen miedo y por eso delegan ya no solo su poder, si no el pensar mismo. Se pavonean pidiendo una verdad con gestos angustiantes, y si les entregan una mentira en forma de cruz o monedas, no notan la diferencia. Al final, se pierden con tanta facilidad por que no tienen la menor idea de lo que buscan... Cuando tranzamos nuestra naturaleza por alienarnos, adaptarnos a determinado medio, lo único que hacemos es trastocar nuestra identidad. Tu tienes que ser lo que realmente eres, has de ser tu propio deseo, inclinación  aquello que se impulsa desde tu núcleo de esencialidad, como voluntad. No hay que hundirse en la mentira, en el fingir, hay que decir lo que es necesario ser dicho, y hacer lo que es necesario que se haga. Y eso solo lo determina tu voluntad y tu desenvolvimiento en la potencialidad. Del núcleo de tu ser, los impulsos de tu deseo te indicaran hacia donde ir.

Me empieza a faltar el aire, trato de nadar en busca de la superficie para poder respirar, una vez que lo consigo, noto que estoy en un oasis. Alcanzo la orilla y salgo del agua. Puedo escuchar un llanto a la lejanía  Me suena tan familiar. Trato de correr en la dirección desde donde los escucho. Muy lejos, en pleno desierto, veo la figura de una mujer, de rodillas y con las manos cubriendo su rostro, a unos metros de ella, un hombre de pie. A medida que me voy acercando puedo distinguirla, el llanto esta teñido de angustia y desesperación abismal. Es Laura. Gustav esta junto a ella. Pareciese que no pueden verme. Comienza a llover, siento el agua en mi piel.

Puedo ver manchas de sangre por la habitación. Tengo un cuchillo en mis manos. Esteban empuña otro cuchillo, y frente a nosotros puedo ver a un hombre con los ojos inyectados y una amplia sonrisa. La hoja de su cuchillo tiene sangre. Puedo ver varios cortes en mi piel, la ropa de Esteban y el otro tipo indican que también han sido heridos. El tipo de ojos inyectados se lanza a toda velocidad contra Esteban que agilmente le esquiva, contra-atacando. El tipo de los ojos inyectados es tremendamente veloz, ha bloqueado con facilidad el ataque de Esteban. 
-No se como pueden resistir tanto, deben entender que es tiempo perdido...- dijo el tipo- nadie escapa del filo de mi cuchillo, yo soy la muerte.

Cuando la lluvia termina, puedo ver como el desierto se ha convertido en un inmenso campo repleto de vegetación.  Numerosos y frondosos arboles se han levantado. Tras uno, puedo ver como una figura femenina sale. ¿Soy yo?

-¿No crees que ya ha sido demasiado? ¿No crees que es tiempo de dejar de comportarte como una cobarde?- me dice mientras se me acerca- Llevas tanto tiempo huyendo de ti misma, de lo que eres y deseas...
-Es que no es fácil...-
-¡Claro que no es fácil! ¿No te parece bastante mediocre tu excusa?  Esa actitud, empujada por esa autoestima con oficio trabajadora de las profundidades, solo ha conseguido hacer de nuestra vida una caricatura. ¿Te imaginas nuestra vida acabara luego de estas palabras? ¿Que pasaría si eres el producto de un sueño, y el soñante se despierta ahora mismo, así sin mas? ¿Habría valido la pena vivir como vivimos? Nos hemos acostumbrado tanto a vivir, que casi damos por hecho que lo haremos por mucho tiempo mas. Pero no, tu jodida hora puede llegar en cualquier instante y no hay forma de que lo sepas. ¿Como pasar entonces, los que pueden ser nuestros últimos instantes, haciendo algo que realmente no queremos, que no nos motiva, que nos deja en la mas repugnante de las sobriedades indiferentes? Esto se ha extendido por mucho, es momento de que despiertes de una vez por todas.- se acerca hasta a mi, y me da un abrazo.

Numerosas imágenes pasan por mis ojos, Laura, el humo en REM y el rostro de Esteban, numerosas personas corren de un lado a otro, varios con banderas y gritando consignas de libertad, la policía se viene sobre el lugar. Algunas personas caen al piso, puedo ver fuego y numerosa gente detenida escapa de los gigantescos vehículos policiales. Estoy en la oficina de Hernando, parece fuera de si, me da un puñetazo y saca una pistola con la que me apunta. Escucho un disparo. Un hombre cuyo rostro no conozco, de abrigo naranjo se me acerca y me entrega un jarro con el liquido verdoso, con un tinte mucho mas oscuro, y de apariencia mucho mas espesa. Me pasa una de las raíces en la mano. Estoy sobre el edificio mas alto del país, la ciudad arde.

-De ahora en adelante, no podrás escapar de ti misma- escucho en mi oído, es mi propia voz. Mi cabeza comienza a retumbar con fuerza, me duele mucho, apenas aguanto. Abro los ojos y frente a mi veo una caída libre, numerosos pasillos del inmenso edificio repleto por hombres y mujeres de túnicas naranjas. A mi lado veo a Esteban.
-Saltemos.- Me mira y asiente, lo tomo de la mano. Saltamos. Cuando voy a llegar al piso el mundo completo se convierte en agua. Me estrello en el agua y me hundo, me pierdo, soy una gota mas en el océano.


Abro los ojos, estoy completamente empapada en sudor. Estoy en la cama, junto a mi, en una silla, duerme Kain. Cuando voy a tocarle el hombro para que despierte, abre los ojos rápidamente  Me mira como sorprendido. Saca un pañuelo de su ropa y me lo entrega. Lo miro sin entender, me señala la nariz.
-Es la primera vez que veo una respuesta como esa...- dice pensativo- ¿Como te sientes?
-No lo se... Diferente pero no estoy muy segura en que- le respondo- ¿Cuanto tiempo estuve?
-Doce horas, a las quince habría sido el limite y te habría traído de vuelta. No comprendo el sangrado de tu nariz... Creo que sera bueno que le diga a Albert que contacte a un conocido...
Me limpio con el pañuelo y lo veo empapado en sangre.
-¿A quien? - le pregunte- ¿Es esto serio?
-A un amigo de tu hermana... no sabemos que es lo que es, no es normal para esto. Puede no tener relación,  pero no estaría mal, de cualquier forma, asegurarse de que todo esta bien...-
-Estoy un poco cansada...-
-Bien, te dejare descansar...- dice mientras se levanta y hace un gesto de despedida al salir de la habitación. De un segundo a otro, aparezco desnuda en una cama que no conozco. Frente a mi veo el rostro de Glenn, que retrocede rápidamente y toma un cuchillo. Esta desnudo y tiene un corte en cada brazo. Tengo un cuchillo ensangrentado en mis manos. ¿Que esta pasando? Suelto el cuchillo y retrocedo. Tengo miedo, se me escapan las lagrimas. Glenn guarda su cuchillo, se viste rápidamente.
-Ha estado bueno de cualquier forma- abre la puerta y se marcha. No puedo comprender, cierro los ojos.


Estoy teniendo una pésima noche. Hoy tengo deseos de hacer correr la sangre de todo aquel que se me cruce por delante, apuñalarme en el estomago y gritarle a la existencia mi ultimo aliento. Trato de mantener el control, aun hay mucho por hacer como para perderse completamente en el abismo. Una y otra vez vuelven los recuerdos azotando mi rabioso cerebro. 

..De repente, te vi ahí. Ausente como casi siempre, entre viva y muerta, entre victima y victimaria de un mundo que solo deseaba llenar de calamidades. Como siempre, en lo tuyo, como siempre volcando toda esperanza miserablemente, actuando como una botella en una fiesta sin vasos. Todo tu cuerpo no era mas que evidencia en estado puro, miles de culpables, miles de pruebas en forma de huellas digitales, fluidos y quizás que asquerosidad mas.
Una caída estrepitosa, similar a la de un meteorito llegando a la tierra. La tierra soy yo, aparentemente. De divinidad a un simple y cochino bonobo, esa ha sido tu transformación.De solo pensar en tu andar, en tus asquerosos pasos que solo pudren la tierra, en cada uno de los abruptos movimientos de tu cuerpo al chocar con otro de quizás que individuo sin importancia, se me retuerce el estomago, la garganta y los cojones. Sentí ganas de quemar cada bosque ancestral de este planeta, sentí ganas de aplastar como a hormigas a cada iluso creyente del amor, envenenar toda fuente de agua para la humanidad, contaminar y ennegrecer el mar solo con mi odio y la sangre de miles de ángeles. Ansié ver sufrimiento, ansié ver a cada uno de aquellos asquerosos bandidos que manosearon mi mas preciado símbolo, cual adolescente hablando del amor sin siquiera saber quien es su acompañante, ansié tenerlos uno a uno e invadir los rincones mas sucios de sus almas, empaparme en su mierda y escupirselas en la cara, quemar cada uno de sus sueños y hacer que cada roce que tuvieron con mi sucio bonobo se transformasen en caricias del cuchillo mas filoso de la despensa. Ansié ver el miedo en sus ojos, ansié verlos arrepentirse del nacimiento de su madre y maldecir el solo hecho de la existencia. Pero sin duda lo que mas ansié, fue ansiar ver como cada una de las huellas digitales de tu cuerpo empezaran a quemar tu alma lenta y dolorosamente convirtiéndote en nada mas que un despojo humano, carente de cariño, alegría y movimiento. Pero por mas que ansié ansiar aquello, no conseguí mas que el deseo de olvidar tu existencia, que por cierto tampoco conseguí.Tu entrepierna es patrimonio de la humanidad, tu piel no es mas que un producto que se promociona en un puto supermercado y que eternamente se entrega como muestra gratis. Tu no sabes lo que es el cariño, tu no sabes lo que es la necesidad, tu no sabes absolutamente nada salvo darme motivos para odiar cada segundo que pasamos juntos en el mismo universo...


¡Jodida puta asquerosa de Sofia! Despues de tanta palabrería uno se espera que al menos haya un poco de consecuencia. Puedo verla una vez mas, en pleno REM, con un cigarro en una mano, una botella de whisky en la otra, besando desenfrenadamente a un tipo tras otro. ¡Y para peor! La muy desgraciada que tanto abogaba por el burguesito se entrega así de sencillo a cualquier otro imbécil. Y entre todos estos imbeciles, no le basto y tenia que incluir a Glenn. Habiendo tanto hijo de puta asqueroso mas que podría haber devorado tenia que elegirlo a el. Vuelvo a sentirme como en mi adolescencia, una vez mas, Glenn, adelantándose a todo y arruinando cualquier posibilidad que se me asomaba. Vuelvo a ser el perdedor.
-Fuiste un imbécil al creer que eso resultaría.
-Guarda silencio, ni siquiera eres real hijo de puta- le respondo molesto. La gente en la calle me mira con extrañeza. 
-Tienes que dejar de perder el tiempo en esas estupideces y abocarte a lo que verdaderamente importa, la gran explosión se acerca.- me dice mi propia figura, que camina junto a mi por la calle. Se que nadie mas lo puede ver...- Supongo que no te has olvidado de la notita que pillaste en la cama. 
-En eso estoy, necesito sacarme esta porquería de la cabeza-
-Ponte la capucha- me dice apuntando a un policía en la esquina. Me la coloco. Mi largo abrigo rojo se ondea con el viento. Cruzo la calle dejando atrás al policía.
-¿No es esto pura paranoia?-
-Claro que no, la maquina ya nos tiene identificados formalmente. ¿Crees que dejaron pasar a nuestro bonito hombre muerto sin dedos?- me responde riendo a carcajadas. Entro por el edificio de mi abandonado departamento. Subo por la escalera unos cuantos pisos y cruzo el pasillo, una cortina se corre y veo la cara de un viejo vecino con el que jamas cruce palabra, finalmente llego hasta la puerta de mi departamento. Tiene una cinta puesta por la policía. Ya han estado aquí. Saco mis llaves y abro la puerta.
-¿Que se supone que encontraríamos aquí si la policía ya vino?-le pregunto
-Sigue adelante- Con la mano palpo la 9 milímetros con silenciador que me han entregado los Maníacos  Camino por el lugar. 
-No veo nada- le respondo.
-¿Y la habitación?- Camino hasta ella y sobre la cama puedo ver un extraño artefacto.
-¿Que es esto? ¿Como sabias?- le pregunto- ¿Fuiste tu el de la nota?
-Preguntas mas importantes hay ahora, revisa el artefacto.- Tomo el artefacto entre mis manos. Son muñequeras y guantes. Pero no cualquiera, son los de los dibujos del padre de Albert. ¿Es esto lo que el llamaba "guantes llamarada"?
Siento un ruido en la puerta de entrada del departamento.
-¡Policia! ¡Manos en alto!- escucho mientras se abre la puerta. Cinco policías entran al departamento. Saco la nueve milimetros. ¡Carajo! Solo tengo las balas de la pistola. Apunto al mas cercano y disparo. Veo como  cae al piso luego de un certero disparo en la cabeza. Los cuatro policías abren fuego. Me lanzo al piso para evitar las balas. Tomo angulo nuevamente y disparo, otro al piso. ¿Como carajos estoy tan preciso?
-Necesitamos refuerzos, tenemos dos oficiales caídos ¡Rápido!-
Disparo nuevamente, un policía cae luego que una bala atravesara su corazón  Continúan las ráfagas de disparos, solo quedan dos. Tengo que salir rápido de aquí  Apunto a otro, pero se pone a cubierto y mi disparo falla. Joder, no se cuantas balas quedan. Apunto nuevamente y logro darle en la cabeza a un policía mas. Apunto al ultimo policía  que aprieta su gatillo apuntándome  pero no dispara, sin balas. Aprieto el gatillo, tampoco dispara. Se me agotaron las balas. Veo el policía ponerse a cubierto y escucho como recarga su pistola. No tengo mas balas, tengo que ir sobre el, es el ultimo. Saco el cuchillo y me lanzo directamente corriendo hacia el policía  al momento en que me apunta y comienza a apretar el gatillo puedo ver que una bala sale y me da de lleno en el pecho. No, no ha ocurrido, pero lo he visto. Me lanzo rodando hacia el piso y la bala pasa sobre mi, quedo frente al policía  con una mano le lanzo la pistola al piso y con la otra le corto la garganta. La sangre me da de lleno en el rostro. Puedo sentir esa calidez tan extraña, pero tan seductora. Corro hasta la pieza, tomo los guantes y muñequeras y me los coloco. Abro el mueble de la cocina y veo dos latas de gas. Conecto a las balbulas por dentro de mi abrigo.
-Después pruebas el juguetito nuevo, hay que salir de aquí  me grita mi figura. Salgo corriendo del departamento. Puedo ver a uno de mis vecinos que me mira aterrado
-¡Policía! ¡Ayuda!- trata de correr pero lo alcanzo de inmediato. Lo tomo del cuello y lo levanto.
-Así que fuiste tu quien los llamo-
-Policía... Ayuda... Delincuente, siempre supe que algo andaba mal contigo-me responde.
-Sabes... Estoy teniendo un muy muy mal día y no estas precisamente ayudando a mejorarlo-
-Poli...-le pego con la otra mano
-Cállate estúpido .. Se te ha ocurrido elegir el bando equivocado en el peor de los momentos. Que patéticas son tus ultimas palabras- le digo mientras saco mi cuchillo y se lo clavo en el corazón.- Hijos de puta...
 Estoy ennegrecido. La sangre se confunde con facilidad con el color del abrigo. Veo la puerta abierta del puto delator, se puede ver la foto en grande del actual presidente. Estúpidos imbéciles, levantando figuras de quienes solo les entregan miseria y marginacion. Corro por las escaleras a prisa.
-Ha estado maravilloso ¿Viste el instante en que se fue?- me pregunta mi figura que mientras salta por las escaleras. Si, si lo vi... y se sintió tan bien... estoy algo preocupado.
-En el fondo sabes que lo has disfrutado, estas llegando a tu verdadera raíz retorcida y cruda. Esto es parte de lo que eres ¿Vamos a condenar al león por matar a su presa? Tenemos tanto por hacer...
Salgo del edificio y veo una patrulla de policías, un escuadrón de 7. No puedo enfrentarlos y salir victorioso, tengo que huir. Comienzo a correr por las calles mientras la policía vas tras de mi, puedo sentir como una bala perfora mi espalda. No, no ha ocurrido, pero lo he vuelto a ver. Nuevamente me lanzo al piso y escucho la bala pasar sobre mi. ¿Como es que he podido adelantarme a todo esto? ¿Que es lo que esta pasando? Se escucha una ráfaga de balas y puedo oír como va tras mio la policía  Doblo en una esquina y a lo lejos veo una barricada y mas cerca, un gran numero de personas reunidas, gritando consignas contra la corrupción  Parece que ha estallado la bomba mediática  ¿Manifestaciones espontaneas? ¿Habra visto esto venir Albert?
Son cerca de cincuenta personas, y al ver a la policía tras de mi, puedo ver como recogen piedras de la calle.
-¡Alto! Este hombr...- trata de decir un policía mientras una piedra le impacta en la cara.
-Rápido  ¡vente!- escucho que me gritan de la multitud. Al llegar hasta ellos, numerosas personas lanzan sistemáticamente piedras haciendo retroceder al pequeño escuadrón que se veía repelido ante la superioridad numérica. 
-Hay que andar con cuidado compañero, estos perros andan bravos- me dice un hombre con capucha.- ¡Atentos cabros!
A nuestra espalda, un escuadrón de aproximadamente 25 fuerzas especiales viene a paso firme. Comenzamos a recoger piedras y atacarlos tratando de hacerlos retroceder. Con sus grandes escudos continúan su paso firme. Se escuchan explosiones y podemos ver caer lacrimogenas entre nosotros. Un par son pateadas de vuelta, mientras que otras mas comienzan a llenar el ambiente de ese gas toxico. Mi respiración...
-¡A la barricada cabros!- grita un hombre de la multitud, sin el rostro cubierto. 
Retrocedemos con las fuerzas que podemos hasta la barricada. Muchos recogen piedras, mientras que otros se armaban con palos de la barricada. Veo mas gente llegar tras la barricada, un grupo de cerca de 60 personas que corean fuertemente "¡Somos mas, somos muchos mas!"
El escuadrón de fuerzas especiales arremete con fuerza, las lacrimogenas que son lanzadas hacia las barricadas son devueltas sistemáticamente. Las lumas están cada vez mas cerca.
-HAY QUE AGUANTAR CABROS, SOMOS MAS-Gritan varios, las piedras comienzan a ser lanzadas para hacer retroceder al enemigo. Varios llegan hasta la multitud y empiezan a repartir palos sin ton ni son. 
-PACO CULIAO DESCLASADO.- le grita un joven mientras recibe un golpe en la cabeza, cae al piso. La multitud luce impactada ante la brutalidad. Llegan mas policías y empiezan a patear al joven en el suelo. Mas policías se encargan de hacer retroceder a la multitud.
-¡Lo van a matar!- grita alguien, la gente se abalanza sobre las fuerzas especiales, entre patadas, piedrazos y palos fueron retrocediendo. Uno de los policías parecía enajenado con el joven en el piso y continuaba dándole patadas de forma reiterada en la cabeza. Hay mucha sangre en el piso. La policía empieza a retroceder, corro aprisa y alcanzo al hijo de puta que golpea al joven. Le doy un fuerte puñetazo en el rostro y miro al piso. El joven esta muerto. La multitud agarra al enajenado policía que pierde su arma. 
-LO MATÓ- grita uno de las personas al ver al joven. Veo la angustia y la ira en muchísimos rostros.
-¡Se acabo, este es tu jodido castigo, perro asqueroso!- le digo mientras abro el paso de gas en la muñequera. Apunto al cielo con el guante derecho y chasqueo los dedos. Una llamarada sale desde el centro de mi palma. Le indico a la gente que retroceda, estos lo hacen, sorprendidos.- Por que toda vuestra brutalidad e infamia no puede quedar impune. Debes arder, seras el primero. Todo aquello que nos domina y violenta, arderá. La maquina estallara.
Apunto directamente al perro traidor y lo incinero. Esto yo lo recuerdo. Puedo escuchar sus gritos de dolor, me acerco mucho mas a el y con el guante izquierdo, duplico la potencia de la llama. Ya no hay gritos, esta calcinado, ya casi arde por si mismo. Detengo el flujo de gas. Y salgo corriendo. La gente impactada no sabe que decir. Algunos lucen horrorizados mientras que otros celebran el incendio de quien nos ha quitado una vida. Se que muchos se sienten vengados. Me mezclo entre la multitud y finalmente salgo de esta y corro en dirección a la fabrica.

-¡GALLINAS ROSTIZADAS CEREBROS FRITOS!- Nicolas me abre la puerta saludándome  Entro rápidamente  Creo que no me han seguido. 
-¿Y esa cara?- me pregunta
-Ha sido un día muy extraño.- mira los guantes- tengo que ver a Albert.
-Debería estar en la sala de planificación -me dice. Le hago un gesto de agradecimiento y emprendo camino a través de la gigantesca fabrica. Veo numerosa gente reunida, como de costumbre. Entre los grupos puedo ver a la asquerosa de Sofia junto con Amelia. Cuando me ve, puedo ver la tristeza en sus ojos, culpa. Es repulsivo. Continuo mi camino y finalmente llego a la sala de planificación. La puerta se abre antes de que la toque, veo salir a Ayleen con un rostro de duda tremendo impregnado en su rostro. 
-¡Esteban! ¿Como estas?- me dice sonriendo
-No sabría responderte, ha sido un día agitado. ¿Que hay de ti?-
-Hay una operación... es algo nuevo para mi- me dice.- Bien, debo ir a ello
Me besa en la mejilla y se marcha. Entro a la habitación.

-Esos guantes...- me dice pensativo- yo los conozco.
-No se como, pero son los que diseño tu padre- le respondo- en el viaje final donde Zenon pude verlo a el, y a ti.
-Y muchisimas cosas mas, me imagino. Es sorprendente lo que es capaz de realizar esta planta. Arabel fue quien la encontró.  Era un herbolario, en sus tiempos se hablo en la cultura popular de el "Gran arbol". Decía la leyenda que era el ser viviente mas antiguo de la tierra, que al comer uno de sus frutos podías conectarte con la profundidad de la vida y sanar todas las enfermedades. Y resulto no ser un mito, Arabel, aventurero se lanzo tras la búsqueda de esta mítica leyenda y luego de mucho esfuerzo, consiguió dar con el. El relata que encontró un templo de una civilización antigua irreconocible, que estaba situado en pleno ártico  en una cuenca entre cordilleras, la cuenca increíblemente  en pleno ártico  tiene un clima templado... parece casi irreal. La cuestión es que en los interiores de este templo encontró una serie de pasadizos subterráneos y en la gran profundidad dio a parar con un inmenso árbol que tenia frutos luminiscentes... Pero creo que eso ya lo sabes...-
-Lo he visto-
-Ambos- me responde- ¿Como has ido con la expansión?
-¿Expansión?
-¿No has notado que tus sentidos se han intensificado? ¿No has visto como te puedes adelantar a las situaciones, sin saber como? Nuestra intuición exploto y comenzó a expandirse, casi sin que lo notemos. Ya no solo miramos, observamos, sin darnos cuenta nuestra vista se amplio y esto nos dio una mayor claridad del tejido causal en el que estamos inmersos.
-¿Entonces eso ha sido todo esto?
-No se como, pero al parecer, el rendimiento físico también se ve incrementado. De alguna manera esto nos esta potenciando. Los frutos hacen que esta explosión incremente con muchísima mas potencia, con las hojas proporciona las visiones y esta explosión, pero de forma mas lenta.

De pronto escucho como se abre la puerta, veo la inmunda cara de Glenn
-¡Tarado! Te has traído a la policía contigo.- me dice y sale corriendo en dirección al portón.
Nos levantamos y corremos hasta la puerta de la fabrica. Sofia esta ahí. Tiene un cuchillo en la mano y luce una extraña sonrisa. Yo he visto esa mirada antes, pero no en ella.
-Son 7, son de investigaciones. No han venido a desalojar- dice Nicolas.
-¿Que hacemos? - pregunta Amelia un poco asustada.
-Matarlos y punto- dice Glenn sacando su pistola.
-Dejemoslos entrar quitemosle las armas. Los encerramos y comprobamos si están totalmente perdidos o no- dice Albert
-YO QUIERO PROBAR DE NUEVO ESTA PRECIOSURA- dice Sofia mirando con un amplia sonrisa su cuchillo.
Apagamos las luces y nos ocultamos en la oscuridad. Nicolas abre la puerta y vuelve a las sombras. Los policías entran al lugar con las pistolas en mano. Cuando están todos adentro saltamos sobre ellos. Nicolas cierra la puerta. Uno de los policías trata de dar aviso por un dispositivo. Sofia se abalanza sobre el y le clava el cuchillo en la mano.
-¿PARA DONDE IBA ESA MANITO?- le dice sonriendo mientras este grita de dolor. Gustav controla a Sofia y un grupo de maníacos comienza a colocar amarras en las manos y pies de los policías, una vez puestas los toman y los llevan a una de las aun disponibles habitaciones en la fabrica.
-Sofia ¿Que ha sido eso?- le pregunta Amelia preocupada. El rostro de Sofia pasa de la sonrisa maníaca, al miedo y el agobio. Se toma la cabeza con las manos y guarda su cuchillo.
-No lo se...-le responde. La miro y no puedo entender que me pasa, conviven el mas corrosivo de los odios  y el mas grande de los deseos, en una sola figura. Tengo una constante sensación de deja vu.
-¿Que carajo has hecho? ¿No ves que has puesto en riesgo todo?- me grita Glenn
-Creí que no me habían seguido.-le respondí
-Pues creíste mal- me responde. Mira a Albert- Ya lo tienen identificado, si sigue estando acá acabaran teniendo las excusas suficientes para entrar.
-¿Quieres echarlo?- pregunto Nicolas extrañado.
-No tengo idea, solo creo que si sigue aquí todo se ira a la mierda. Estas en las noticias Esteban, los seis muertos en tu apartamento y el vídeo de como incineraste al policía frente a toda la gente.- estoy jodido.
-En las redes sociales esta el vídeo, tu rostro no se ve por la capucha- me dijo una muchacha con un notebook en sus manos.
-A mi pesar, tengo que estar de acuerdo con Glenn con que esto si puede presentar un peligro para la fabrica...- dice Albert- Hay mucho por hacer como para que nos encuentren, a todos, partiendo por ti. Tengo unos contactos por los suburbios. Pueden darte un lugar donde puedas estar a salvo de la policía, quizás, algunos hasta acabarían defendiéndote en casos últimos. Nos comunicaremos en ciertos puntos específicos, para las asambleas tu compañera se encargara de llevar tu postura.
-¿Que? ¿Tengo que irme? ¿Mi compañera?- le pregunto a Albert.
-Sofia se encargara de mantenerte en contacto con la acción de los Maníacos- me respondió
-¡Joder!¿Por que ella?
-Por que me lo ha pedido... esto ya lo habia visto venir, lo de la noche en que partiste donde Zenon no fue pasado por alto por la maquina.-
-La puta madre ¿No puede ser alguien mas?
-Sabes que estamos con numerosas operaciones, Sofia es la indicada- me responde.
Rabia, maldigo esta vida que se tuerce mas y mas a cada segundo.



Estoy cansado. Una vez mas Sofia me ha dejado esperando sin siquiera avisar. Ya casi no duerme en la casa, me agobia pensar que quizás este pasándose al otro bando. De cualquier forma, un hombre tiene necesidades, el streapclub servirá de algo. Entre las numerosas bellezas, puedo apreciar una muchacha, apenas con dieciocho años aparentemente, de pelo negro, tiene una extraña mirada.
-Quiero esa- le señalo a un tipo junto a mi. Este la llama y ella viene de inmediato.
-Mírate querida, estas preciosa. ¿Eres nueva?
-Preciosa y nueva.- me responde.
-Acompáñame.- la mujer se me acerca y sienta sobre mi. - No te imaginas querida... estoy apunto de colocar a mi hermano de ministro del interior. En este momento, estas en el regazo del hombre mas poderoso del país.
Continua su baile y me mira, como dispuesta a escuchar.
-Ni te imaginas las cosas que están pasando, en estos instantes el terrorismo prepara sus armas para destruir la democracia, mi democracia... Ahora, podre finalmente salvar el orden, y hacer justicia por mi padre. Insisto en que fue un asesinato... Ademas Sofia, me deja solo en un momento como este, me siento tan decepcionado...
-Estoy yo aquí para levantar ese animo- dice acercándose aun mas y continuando con su baile.



-¿Ha ido todo bien?- pregunta Albert a través de este repulsivo aparato
-Me han tratado bien aquí, aun tengo muchas preguntas-
-Tomate el tiempo que necesites, recuerda que si no superas esto, puede ser que vuelvas a olvidarlo todo. Estoy lejos, pero sabes que si necesitas de mi ayuda, apareceré-
-Estuve recordando unas ultimas sesiones con mi psiquiatra. Me decía que por algún especie de trauma repelía toda esta basura de argh... Tengo problemas para expresar mi agradecimiento y en este momento es tremendo. Puaj, debo tratar de expresar un poco mas estas cosas humanas desagradables que ocurren. Akh.. Te estimo. ¡Ya esta! MIRA QUE GLORIOSA QUE SOY.-
-Es mutuo.- ¡Que asco que me doy! Esta sonrisita tan humana.
-Tengo que..  argh, algo. Hasta pronto-le digo y corto el teléfono apresuradamente. 

Camino por las calles del gran Pueblo, el ultimo del país al norte. Tengo la sensación de haber estado aquí antes. Al pasar junto a un teatro siento un chispazo.

-Laura, este es Fernando Aristegui- me dice sonriendole a un hombre de cabello negro y gesto soberbio. 
-¡El famoso artista!- le respondo
-¿Y quien eres tu, hermosa?- dice acercándose y poniéndome su mano en mi mejilla. Lo miro extrañada. Veo rabia en el rostro de Karol*)si decidí así sin mas cambiarle el nombre de Karen a Karol, en la edición completa se corregirá(
-Se podría decir que una artista y una pensadora, tengo muchas ideas.
-Karol me hablo de ti, y si, ahora que te veo estoy bastante interesado- me dice jugando con mi pelo- voy a hacer que toques el cielo, confía en mi...



Estoy en mi habitación en los suburbios. ¿Cuantos días han pasado? ¿Como es que el tiempo se ha escapado de manera tan rápida?  Suena la puerta. Miro por el pequeño ojo de esta y veo a una Sofia con los ojos abiertos como platos.
-¿Como estas, querido?- me dice al abrir la puerta, me mira de una forma asquerosamente provocativa.-
-Y tienes el descaro de decirme querido. Dame la información mejor sera- le respondo cortante, se me acerca y me besa en la mitad de mi boca. Retrocedo y la miro sin comprender.
-¿A que estas jugando?-
-¿A que juegas tu con todo este teatrillo? Tienes las pupilas dilatadas y tu pulso agitado, se saborea la mitad de tu puta boca- me responde riéndose  Da un beso y me lo sopla.- No perdamos el tiempo querido, el abismo se nos puede venir encima.
-No puedo entenderte Sofia, no comprendo este cambio...-
-Ya entenderás, niño mio, ahora nos llama la acción con los Maníacos-
-¿Que pasa?
-¿No te has dado cuenta que mañana es el día de la marcha? Diversas organizaciones estudiantiles y sindicatos han adherido y llamado a paro nacional. Es el día de la operación masiva. Te traigo este bolsito tan lindo con todos los implementos necesarios. Se ha acordado para no dañar el proceso con la exabrupta respuesta del régimen,  no asesinar a ningún policía el día de mañana, pero si, aportar y reducirlos sistemáticamente, liberar a todos los detenidos... La idea es que en esta manifestación  la gente triunfe y la policía no pueda responder.  Este primer estallido tiene que ser victorioso para acelerar el proceso inminente. Mañana te pasare a buscar, tienes que estar listo, iremos juntos y haremos equipo con Gustav y Nicolas. En el campo de batalla nos encontraremos con el resto.-
Se me acerca nuevamente y acaricia mi cabello.
-Niño mio, se nos viene encima la prueba de nuestras alas- me besa en la boca y siento una vez mas el proceso maldito de las galaxias estallando. - Hasta entonces extrañame, tengo cosas que hacer. Nos veremos querido.
La puerta se cierra.



Puedo verme en un pasillo. A mi espalda esta la habitación de Esteban. No tengo el bolso. ¿Habré ya hablado con el y no puedo recordarlo? Tengo deseos de volver, pero no me atrevo. Se que esta molesto por lo de REM aquella noche. La verdad es que ni siquiera se bien que paso. Me esta pasando bastante seguido que pierdo trozos de mi vida, lo de la mano del policía todavía me sorprende. ¿Que esta pasando conmigo?  
Estas semanas he evitado lo mas que he podido a Hernando, estoy agobiada de mentir y fingir. La verdad, siento que estoy perdiendo el control y eso pone en riesgo no solo mi identidad, sino también mis lazos.
Mañana es el paro nacional, la primera gran operación masiva. ¿Podremos potenciar y ayudar a dar victoria a estas semillas de sublevación y caos que están brotando?